Estudiantes igualó anoche sin tantos con Olimpo de Bahía Blanca y es el único escolta del líder Colón de Santa Fe, en un encuentro que se desarrolló en el Estadio Centenario José Luis Meiszner, correspondiente a la décima fecha del Torneo Final.

Los dirigidos por Mauricio Pellegrino debieron ganar el partido, ya que generaron varias situaciones como para quedarse con las tres unidades, pero entre la falta de precisión y los remates en los postes debió conformarse con un empate que lo pone a un puntos del líder, Colón.

Fue un dominio total del Pincha, en cuanto a situaciones, intenciones y posesión de balón. Los locales siempre estuvieron parados entre mitad de campo y tres cuartos, manteniendo constantemente el control del esférico. Si bien fue el único de los dos que propuso de cara al arco del adversario, el cuadro platense careció de profundidad y eficacia, y muchos de sus ataques terminaron con remates al arco de media distancia sin consecuencias.

Aunque fue rescatable la intención de proponer. A los 11’, un centro de Juan Sebastián Verón, quien retorno luego de 4 jornadas, encontró solo al borde del área chica a Román Martínez, quien cabeceó y la pelota se fue desviada. A los 16’, Joaquín Correa sacó un potente derechazo que Champagne envío al córner.

Estudiantes era el que proponía, mientras que Olimpo esperaba de contraataque ante un cuadro local que contaba con la posesión del esférico. El único delantero neto del local, Guido Carrillo, se mostró movedizo y contó con un puñado de situaciones.

El primer tiempo fue tornándose monótono en el sentido de que Olimpo se cerró en el fondo, pendiente de lo que hacía Estudiantes con el balón. En la segunda etapa, la tendencia fue la misma, pero Estudiantes generó menos situaciones, no le encontró la vuelta al ataque y careció de claridad. Olimpo recién salió de su situación expectante sobre el final, aunque no generó peligro sobre el arco opuesto.

Sobre el final, Carrillo tuvo en dos chances el gol de la victoria, pero las erró y en definitiva Estudiantes perseveró, pero quedó como escolta porque Olimpo resistió lo que le tiraron en su afán de conservar la categoría.