Lanús, que jugó aún peor que el fin de semana pasado con Boca, desperdició la oportunidad de regresar a la punta del torneo Apertura de fútbol al empatar sin goles ante Belgrano, en Córdoba, en un partido de la octava fecha.
Con este resultado, Lanús llegó a 15 unidades, dos menos que el líder, Boca Juniors (recibe hoy a Estudiantes), mientras que Belgrano alcanzó los 13 puntos. En el inicio del partido, Lanús buscó en ataque, contó con un par de aproximaciones, pero no concretó. Pero una vez que pasó ese leve predominio del conjunto visitante, Belgrano se acomodó mejor en el campo de juego, a partir del buen trabajo de Guillermo Farré en la contención y con algunas pinceladas de Franco Vázquez comenzó a complicar a su rival. A los 6 minutos, hubo un claro penal de Carlos Izquierdoz sobre César Pereyra, que el árbitro Pablo Lunati no sancionó.
Lanús, sin el aporte de Diego Valeri (apagado y bien marcado), lució desdibujado. Tampoco entró mucho en juego César Carranza y los puntas Mario Regueiro y Silvio Romero quedaron aislados. Dentro de ese contexto, el conjunto de Schurrer luchó el partido más que jugarlo. Entonces, entre las limitaciones de Belgrano y la apatía de Lanús se despidió el período inicial.
La segunda etapa fue un poco más de lo mismo: el equipo cordobés con más actitud que fútbol y el conjunto granate con una alarmante falta de juego e ideas. Belgrano, a todo esto, se paró para jugar de contraataque, lo que más le gusta. Más allá de lo hecho o intentado por los dos equipos, el partido fue muy malo. Y el 0-0 los definió. No merecieron nada más.