Fue figura en la inolvidable aventura de conseguir el ascenso. Se ganó el corazón del hincha de Sportivo Desamparados y también el arco puyutano. Por suspensión, se quedó sin poder disfrutar del debut frente a Patronato en San Juan y luego vio desde el banco, las dos derrotas frente a Chacarita y ante River. Ahora, Diego Aguiar sabe que es su momento de volver al arco pero lo asume con el mismo profesionalismo y la misma calma con la que ataja. Sin nada que reprochar por no haber estado y sin nada que agradecer por estar.

“Estas son las reglas del juego. Esto es fútbol y si bien yo sabía que lo del ascenso había logrado darme un plus en el equipo, cuando comenzó esta nueva etapa de la B Nacional, se sabía que había que pelear el lugar como todos, en igualdad de condiciones. Se podía dar de jugar o no y lo único que quedaba por hacer era trabajar. Como siempre”, abrió el santafesino sabiendo que su regreso a la titularidad era casi un reclamo del hincha de Sportivo, aunque nunca lo quiso admitir.

“Uno siempre tiene que dar lo mejor. Cuando juega, para serle útil al equipo y cuando no, sumando para el grupo y demostrando siempre que se merece la chance de jugar. Yo lo asumí así siempre y no me desesperé nunca. Espero dar lo mejor, porque si bien estamos en el camino correcto, haciendo buenos partidos, lo que necesitamos es empezar a sumar puntos y más de locales. Ese es mi pensamiento y creo que es el de todos los muchachos que formamos parte de este plantel”, analizó Aguiar.

Luego, entrando de lleno en las preferencias que generó en el hincha de Sportivo, el arquero las agradeció pero sostuvo ante todo que en el fútbol las reglas del juego existen y siempre fue muy consciente de eso: “Se que me gané un lugarcito en el corazón del hincha de Desamparados por haber estado en el ascenso, pero en el fútbol todo pasa rápido y hay que saber que todos los días se rinde examen. Nadie tiene el puesto asegurado y por eso, hay que trabajar. Ese es mi lema: trabajar”.

Ya instalado por segunda temporada en San Juan, Aguiar se da tiempo también para hablar de lo cómodo que se siente en la provincia: “Es un lugar muy lindo para vivir. Tengo familia y acá se puede andar tranquilo. Realmente, me gustó San Juan y estoy más que agradecido por cómo nos han tratado siempre”.

Finalmente, para Diego Aguiar, estar en la B Nacional es un logro que no se puede desaprovechar: “Esta categoría es tremenda. Muy profesional y nosotros tenemos el privilegio de jugarla.

Tenemos que abocarnos de lleno al objetivo que tenemos que es mantener la categoría porque no creo que sea muy fácil volver a conseguirla. Ese es nuestro objetivo y vamos a luchar para eso porque Sportivo se lo merece”.