El entrenador de Boca, Miguel Ángel Russo, tiene tres apellidos para tres puestos a cubrir, dos en la defensa y otro adelante, en el equipo que piensa para apuntarle a la Copa Libertadores 2020.
El chileno Mauricio Isla, marcador de punta derecha; William Tesillo, zaguero izquierdo colombiano; y el delantero Jonathan Calleri son las prioridades en la carpeta del DT boquense.
Isla, de gran experiencia a sus 32 años y con el pase en su poder, significaría un toque de calidad en el lateral derecho. Más allá del buen momento de Julio Buffarini, el técnico tiene pensado llamarlo antes del fin de semana.
Con respecto a Tesillo, experimentado zaguero colombiano, hay diferencias con la dirigencia del Grupo Pachuca (el club León pertenece a ese grupo) por la cláusula del defensor, que es de 6 millones de dólares.
En ese sector, ante la salida de Junior Alonso -a Russo todavía le duele que se haya ido al Atlético Mineiro- solo tiene como defensor zurdo al juvenil Gastón Ávila, de gran futuro.
Lo de Calleri tampoco es fácil: el delantero de 26 años pertenece al grupo inversor Stellar Group y a ellos les interesa transferirlo a un club europeo, pero las negociaciones están abiertas.
Según Iindicaron fuentes vinculadas al club, hay chances de que el delantero vuelva a Boca son ínfimas.
A la hora de cerrar la carpeta de los refuerzos, Russo también tendrá que evaluar a quienes regresaron de diferentes préstamos, como el arquero Agustín Rossi; los delanteros Walter Bou y Mateo Retegui; y el volante ofensivo Gonzalo Maroni.