En la Argentina hay un dicho muy popular: "Por la plata baila el mono’. Ese refrán puede utilizarse para graficar la situación que viven en sus campañas deportivas dos de los mejores boxeadores del momento: Floyd Mayweather, considerado el mejor peso por peso, y Manny Pacquiao, quien desde hace años viene pidiendo un enfrentamiento porque considera que merece pelear por ese título que no tiene cinturón palpable con brillantes y otras yerbas, pero cuenta con la consideración popular.
Que la pelea "se viene", como dicen los relatores futboleros, lo certifican las declaraciones del mismo Pacquiao, luego de derrotar sin problemas el pasado sábado al estadounidense Chris Algieri. Que no pueden evitarse más, lo dio a entender Mayweather luego de su combate con nuestro "Chino" Maidana, a quien eligió para una revancha porque era -fuera del filipino- el único que podía asegurarle una bolsa millonaria. Uno, "Money" Mayweather, no tiene otra opción para ganar tanto. El otro, "PacMan" Pacquiao, necesita una victoria ante un rival más digno de los que ha enfrentado últimamente para recuperar el prestigio que tiró por tierra aquel derechazo del mexicano Juan Manuel Marquez hace un par de años.
Pacquiao reveló a su llegada a Filipinas, desde Macao donde venció a Algieri, que hay un presupuesto de 180 millones de dólares garantizados para hacer la pelea, de los cuáles 80 millones serían para él.
No fue tan optimista su manager, Michael Koncz, quien reveló que "hasta que no escuchemos algo de Floyd no tenemos grandes esperanzas", pero también reconoció que hay algunas conversaciones.
El presidente del Consejo Mundial de Boxeo, Mauricio Sulaiman, afirmó que su entidad hará todo lo necesario para que ese combate se realice. "Es la pelea que el mundo del boxeo se merece en 2015. El aficionado lleva casi una década esperando", explicó, para luego tirarles el fardo a los dos boxeadores con una frase tan sencilla como contundente: "Si no pelean, mancharán sus carreras. Siempre se dudará de su grandeza". Ya hubo dos intentos anteriores para que ambos púgiles subieran al mismo ring. En ambas algo pasó para que no concretarla. Mayweather exigió que Pacquiao se hiciera análisis dando a entender que en sus períodos de entrenamiento usaba sustancias prohibidas. ¿Será la tercera oportunidad por enfrentarlos, la vencida? No cabe duda que el poder de "Don Dinero" puede tirar todas las barreras que obstruyen el camino a la pelea esperada por el mundo pugilístico.
