Buenos Aires, 30 de Agosto.- "La Doce oficial" dio ayer una muestra de fortaleza y de poder pese al incidente del pasado sábado en la que su líder terminó gravemente herido tras ser baleado, cuando desplegó en lo más alto del estadio de Independiente una bandera que decía: "La barra de Mauro".
La hinchada estuvo dirigida por Maximiliano Mazzaro, mano derecha de Mauro Martín (quien continúa internado tras la bala que le perforó estómago e intestinos), junto a otro de los hombres fuertes de la barra brava "xeneize", conocido como Carlitos de Virreyes.
Para el partido revancha de la Sudamericana, Independiente aplicó el derecho de admisión a los 67 nombres que Boca incluyó en una lista obligado por el contexto político pese a que el presidente del club, Daniel Angelici, no tenía intenciones de marcar a los violentos.
En esa lista, sin embargo, no estuvieron los laderos de Mauro Martín, los que ayer ingresaron al Libertadores de América por una puerta lateral, con las banderas y los bombos que fueron requisados por la policía minutos antes del encuentro.
La historia escribirá desde hoy un capítulo más que importante: según lo que prometió, Angelici confeccionará junto a otros dirigentes una lista de 105 socios que luego enviará a la Unidad de Coordinación para la Prevención de la Violencia en Espectáculos Deportivos (Ucpvef) que no podrán ingresar a La Bombonera desde el momento en que los organismos de seguridad tengan la misma en su poder.
¿Se animará Boca a descabezar -desintegrar- a su barra brava o, como ayer ante Independiente, "olvidará nombres" que lo comprometan?

