La quietud experimentada en los primeros días en este pueblo del estado de Nueva York ya quedó atrás. Con la llegada de todos los protagonistas del evento, Oscar de la Hoya, Bernard Hopkins, los preliminaristas, entrenadores, periodistas y la nutrida agenda de ayer, comenzó a vivirse a fondo el clima de gran velada.
La humildad y sencillez de los protagonistas principales, Lucas Matthysse y Ruslan Provodnikov, no parece presagiar lo que seguramente se vivirá mañana en el Turning Stone Casino & Resort: una batalla memorable, una pelea segura candidata a la mejor del año.
El chubutense y el ruso volvieron a verse las caras en la conferencia de prensa realizada en el teatro Showroom del Turning Stone, donde hubo gran respeto y cordialidad, como ocurrió días atrás en Nueva York.
Tanto Mario Arano, manager de Matthysse, como Marvin Somodio, quien estará como entrenador principal de Provodnikov (en reemplazo de Freddie Roach) fueron los que le pusieron un poco de “pimienta” a la rueda de prensa.
“Lucas está listo para las grandes ligas y lo va a demostrar el sábado con un nocaut fulminante”, sostuvo Arano. “Seguro que lo que dure la pelea será una guerra, pero yo creo que habrá un KO 3 para Ruslan”, anticipó Somodio.
La conferencia fue conducida por Oscar de la Hoya y Artie Pelullo, el presidente de Banner Promotions (empresa que guía los pasos del ruso), quienes coincidieron en lo importante que es hacer este tipo de peleas para que el fanático del boxeo crea en el deporte y salga ganando.
Cuando la rueda de prensa terminó, Hopkins acompañó a todo el equipo Matthysse a la villa de Canastota (situada a 15 minutos en auto), donde está en clavado el Salón de la Fama del Boxeo.
Los objetos “vedettes” para el grupo fueron las fotos de Carlos Monzón, Víctor Galíndez, Nicolino Locche, Pascual Pérez, Juan Carlos Lectoure y Amílcar Brusa (los argentinos que tienen su espacio en el Salón de la Fama).
Fuente: Marcelo González.
Prensa Arano Box.

