La noche del miércoles en el Bicentenario, para él, no fue una más. Unión dejó en el camino a Juventud Unida de San Luis, y lo hizo de la misma manera que eliminó a Alianza y Trinidad, desde el punto penal. Tuvo la suerte de tener en el arco a Paolo Olivera, que le contuvo dos penales a su ex equipo demostrando que ese es su punto fuerte, ya que en sus anteriores equipos también contó con esa fortuna.
El partido terminó empatado 2 a 2 (goles convertidos por Cristian Pérez) y tuvo que ir a los penales. Frente a Alianza el arquero fue Serrano, luego frente a Trinidad fue él. Ahí no pudo atajar penales, porque los rivales erraron. Pero el miércoles en el Bicentenario fue la figura atajando los penales a Albarracín y Godoy, para que su equipo se metiera en la próxima fase y él, en el corazón de los hinchas.
“Era un partido difícil, ellos eran un club de otra categoría, salimos a la cancha a demostrar que no había diferencias y en el primer tiempo se notó porque manejamos la pelota, aunque en el segundo tiempo nos quedamos”, comenzó diciendo el arquero Azul. Paolo, de 28 años, conocía muy bien a la Juve, ya que en la temporada 2008-2009 vistió esa camiseta. “Más o menos tenía un conocimiento a donde iban a patear”, dijo el arquero que en Juventud y en el Deportivo La Punta también de San Luis quedó en el recuerdo por haber atajado penales decisivos. Admite que tiene más fortuna atajando en serie de penales que en penales cometidos durante los ’90: ‘No sé por qué en las series de penales influye la incentivación, aparte el jugador va más nervioso a patear y eso el arquero lo aprovecha”, tiró el mendocino.
Unión, ya está en el quinta fase de la Copa Argentina y no es cosa menor. Tendrá la chance de cruzarse con equipo grandes que militan en categorías superiores. La ilusión de su gente está intacta.

