Tras la ajustada caída con Francia, los argentinos necesitaban una victoria contra Sudáfrica para volver a estar en semifinales, pero quedaron lejos. Fue derrota por 72-14. El comienzo presagiaba lo que después podía pasar. Porque algunos errores fueron aprovechados por los Baby Boks y el hooker Grobbelaar, en dos oportunidades, apoyó para sacar rápida ventaja de 12-0. Hubo una reacción de los argentinos por un pase excelente de Matías Sauze para la conquista de Félix Luna. Aunque poco duró la esperanza y Lombard selló el tercer try de los sudafricanos.
Así y todo, cuando se proponían a atacar, Los Pumitas lastimaban. Tomás Malanos cerró la mejor jugada colectiva con try, y por la floja efectividad de Curwin Bosch, el partido estaba a tiro. Pero de nuevo, desconcentraciones, y en pocos minutos Sudáfrica sacó una ventaja amplia de 31 a 14.
En el complemento, el peor comienzo. Franco Molina entró y estuvo en cancha apenas 10 segundos porque por un golpe en el aire a Van Heerden vio la amarilla. Y Sudáfrica pagó con más puntos. Try de Augustus y Bosch sumó con el pie. Luego, un gesto poco leal de los sudafricanos, ya que Papier entró solo al in goal y esperó a dos compañeros para apoyar.
Los Pumitas no pudieron volver al partido en ningún momento y así sufrieron más tries en contra. Un duelo para olvidar, porque no salió nada y no hubo reacción.
Fuente: ESPN.