Banfield venció anoche con autoridad al Inter de Brasil por 3-1, le quitó su condición de invicto en esta edición de la Copa Libertadores y potenció sus posibilidades de pasar a los cuartos de final de la competición. El colombiano James Rodríguez, Roberto Battión y el uruguayo Sebastián Fernández marcaron los goles del equipo dirigido por Julio Falcioni. que quedó en inmejorable situación para definir la serie a su favor.
Tras un primer tiempo parejo, el Inter se debilitó en la segunda parte tras la expulsión de Kléber y el conjunto bonaerense sacó provecho de tres situaciones claras que los brasileños no lograron resolver.
Dos paradas providenciales del Pato Abbondanzieri ante un cabezazo de Ladino y un remate de Ramírez, además de una falta dentro del área del Banfield del colombiano James Rodríguez a Nei, no pitada por el árbitro uruguayo Jorge Larrionda, fueron lo más destacado de la primera parte.
Pero, dentro de ese equilibrio, Banfield generó situaciones que desnudaron falencias defensivas en el Inter, especialmente de parte del uruguayo Sorondo.
Erviti, James y Quinteros mostraron la mejor versión del Banfield creativo, ambicioso, de un equipo que en varios pasajes se propuso tomar la iniciativa.
El conjunto de Porto Alegre, con D’Alesasandro y Nei como impulsores ofensivos, y con Andrezinho como enlace, emparejó el partido, haciendo trabajar al arquero local, Cristian Lucchetti.
Banfield sorprendió apenas iniciado el segundo tiempo con un remate violento y cruzado del colombiano Rodríguez, abriendo el marcador, al minuto de juego.
Pero, 4 minutos más tarde, el zaguero argentino Maidana rechazó corto de cabeza y desde media distancia Kléber igualó con una volea que dejó sin reacción a Lucchetti
Dos minutos después, el autor del gol se fue expulsado por un pisotón deliberado sobre Ervitti.
Un minuto más tarde, a los 7, Banfield volvió a ponerse en ventaja con un gol de Roberto Battión, que estaba claramente adelantado.
La inferioridad numérica del Inter le obligó a multiplicarse en las coberturas y, en consecuencia, a replegarse, en un partido caliente por los roces, las faltas y las simulaciones de faltas.
El uruguayo Sebastián Fernández sacó provecho de una jugada veloz en el centro del área brasileña, tocó el balón en el momento justo y desde el lugar adecuado, marcó y liquidó el partido cuando se cumplían 80 minutos.

