Las cuentas dan si se cumple la misión porque se llegaría a los 25 puntos y es el promedio que un equipo debe sacar por torneo para mantenerse y los que se puso como meta Rubén Forestello cuando asumió. Y ahí parece apuntar el concepto de San Martín, que empata de local y gana de visitante, para una fórmula tan vieja y conocida como la “media inglesa” y por la que va camino de la mano del “Yagui”.

El empate 1-1 ante All Boys del sábado en Floresta lo marcó, y los antecedentes le dan la derecha. Venía de superar a Boca en San Juan por 6-1. Y antes había igualado 0-0 ante Quilmes de visitante. Por lo que de mantener ese perfil, al finalizar llegará a las codiciadas 25 unidades.

Por delante tiene 9 fechas. 4 de local que se resumen en 12 puntos. Y 5 de visitante que marcan 5 unidades si los empata (ni hablar si gana). Que sumadas dan un total de 17, juntó a los 8 que tiene actualmente redondean los 25 soñados puntos para no descender. “El objetivo es sumar 22 o 23 puntos para mantenernos”, dijo el DT en su arribo y hoy las cuentas le siguen dando en base a los 5 que sumó y los 3 que acarreaba con Perrone.

Argumentos tiene y el cambio de actitud con la llegada de Forestello está dando sus frutos. Porque si bien en su debut ante Godoy Cruz perdió cuando lo estaba ganando, era su estreno y tenía ese margen. Partido en el que San Martín no debió caer y que se fue ratificando con los 3 juegos que llegaron después, en los que siempre sumó y apenas recibió 2 goles, que encima fueron de penal, y anotó 7.

Hoy, este San Martín es otro. Este San Martín con el cambio de aire que generó la salida de Perrone entendió que se puede y nada está perdido, que recuperó el volumen de juego individual y colectivo que parecía archivado, pero que no debe dejar pasar las oportunidades. Y por el momento lo cumple. Ante All Boys, fue el partido que más le costó de los 4 que lleva con Forestello al frente. Y también tiene que ver con que fue el único en el que arrancó perdiendo. Lo que había en juego y en una cancha complicada para muchos equipos, se fue acortando cuando se acomodó y pudo desplegar parte de su juego. El mismo que lo elevó a la máxima potencia para la histórica goleada ante Boca en el Hilario Sánchez. Y que en menor intensidad se pudo llevar por delante a Quilmes, pero falló en la definición. Esa famosa frase de la “media inglesa”, busca ser la bandera del Verdinegro. “Trabajamos para sumar y hace 3 fechas que no perdemos. La realidad es que hay que pensar en Unión y ganar de local”, admitió Forestello tras el empate ante All Boys, quien sabe que ante el Tatengue no cabe otro resultado que el triunfo y sobretodo porque es rival directo en ese mini torneo que componen junto a Independiente y Quilmes, del cual uno sólo será el que triunfe para condenar a los demás.

Si bien el camino es complicado, no es imposible viendo lo que propone y entrega el equipo. Logró la solidez defensiva y en el medio pasa por su mejor momento. Sumado a que adelante la agresividad es otra.

Unión, Argentinos Juniors, Lanús y Estudiantes son los que deberán visitar San Juan. Salvó el “Granate”, el resto no viene bien. En tanto que a Rafaela, Independiente, Tigre, Belgrano y River los deberá visitar y de seguir por la senda que trae no es una utopía llevarse unidades en cada salida. La ruta hoy parece ser esa.