Desde su domicilio en Buenos Aires, Eduardo Walter Trillini comentó a DIARIO DE CUYO algunos recuerdos de su victoria en la primera edición de la Vuelta. "Yo tenía experiencias anteriores en carreras de muchas etapas, pero ninguna con victoria. Debuté en le Vuelta a Mendoza de 1978, estaba haciendo el servicio militar y quedé fuera de tiempo en Uspallata, luego de pinchar cuatro veces y quedarme sin auxilio. Después colaboré con la victoria de Juan Carlos (Ruarte) en la Vuelta a Uruguay de 1980", expresó el hombre que dominó las pistas y rutas del país durante la pasada década de los "80.
Trillini, que por motivo de la consulta sobre la primera edición de la Vuelta, sacó recuerdos del archivo y se emocionó mientras miraba fotos, contó: "Mi primera carrera como aspirante para la clasificación general fue la Vuelta a San Juan. "Yo me había casado hacía poco, el 23 de noviembre de 1981, unos días después corrimos Vuelta del Valle (Río Negro) no me fue nada bien. Pero a la semana siguiente viajamos a San Juan, porque empezaba la carrera. Moisés (Carrizo) uno de los grandes amigos que tengo, me dijo que me quedara tranquilo porque después del día de descanso yo iba a empezar a andar bien. Y no se equivocó. No le erró para nada", explicó.
Según el relato del ciclista que ganara el Premio Konex en 1990 como reconocimiento a su trayectoria, en la primera semana les costó bastante. "Nos tuvieron muy mal los chicos mendocinos, Sabatini (Luis), Cortés (Cayetano), Escalante (Roberto). Nos dominaron toda la semana. Después del día de descanso que fue justo el día del cumpleaños de Juan Carlos (Ruarte, NR: el 7 de diciembre) y lo festejamos con un asado muy bien regado, en el que terminé con algunas copas de más, y después de chayarnos con unos tarros de agua, no me podían hacer callar, yo volví a la concentración gritando que Moisés era mejor que el Payo (Matesevach), ¡qué locura! Como había dicho Moisés, después de esa fiesta, con todo el equipo del Círculo (de Suboficiales de la Policía Federal), empecé a ser otro corredor, a sentirme mejor".
Lo que no recuerda Eduardo, es que antes de ese festejo se había impuesto en la cuarta etapa, que unió Jáchal con Iglesia. Por entonces estaba lejos en la general. "En realidad, todos nos acomodamos y salimos a buscar la carrera, primero con Frossasco (Oswaldo) que estaba cerca y después, cuando subimos hasta Barreal ya era yo mismo. En la crono pasé al frente y luego, con la ayuda del equipo, que era un equipazo, la aseguramos".
En el balance de esa primera edición, Trillini ganó cinco de las 11 etapas. Después incluyó a su rico rosario de victorias la Vuelta de Uruguay (1983) y Rutas de América (1989).