El ritmo de vida de Buenos Aires contrasta enormemente con la tranquilidad de San Juan. Pero también las calles y paisajes bonaerenses son diferentes a San Juan, por eso dos triatletas bonaerenses se fueron encantados con la provincia que recibió el Ironman 70.3 por primera vez en su historia.
Nicolás González es oriundo de Campana y llegó con toda su familia: su esposa, hijos, sus padres y sus suegros. En tanto que Lautaro Carrizo vino de la Capital Federal con un grupo de amigos. Ambos coincidieron en puros elogios para la provincia pero también destacaron el enorme sacrificio que debieron realizar para llegar en óptimas condiciones para la competencia.

Nicolás tiene una fábrica de productos de limpieza y dijo que se entrenó en los pocos momentos libres que tuvo: "Allá no tenemos la suerte que tienen acá de poder salir andar en bici y encima tener montaña a dos pasos. No nos queda otra que entrenar en el rodillo durante toda la semana y a veces los fines de semana sí, podes salir", expresó.
Lautaro Carrizo quedó cuarto en el top five, para él el sacrificio fue enorme porque trabaja y estudia, por eso más de una vez los entrenamientos debió realizarlos en la madrugada: "Por ahi en la siesta me quedaba dos horitas entre la facultad y el trabajo y aprovechana para subirme al rodillo y sino de madrugada tenía que ser, no quedaba otra. Los sanjuaninos son unos privilegiados, en tener estas vistas hermosas y encima poder entrenar", manifestó.
Corro Ironman hace cuatro años, ahora arrancando despues de la pandemia.
