Llegó la semana pasada a San Juan y estará un mes aproximadamente. Al igual que en los 25 años anteriores, compartirá mucho tiempo con sus amigos y familiares. Pero esta visita tiene también otros fines. El de "sondear" el terreno para emprender nuevos proyectos. José Luis Páez, uno de los mejores del hockey sobre patines de todos los tiempos, empieza a ver su vida profesional abajo de los patines. "Desde junio que vengo descansando en el Reus y debido a la crisis que hay en Europa es que estoy interesado en otras cosas", reconoció abiertamente el dos veces campeón del mundo con la Selección argentina.
No se puede certificar que el "Negro" Páez colgó los patines porque todavía está en negociaciones con sumarse al Barcelos de Portugal para jugar entre diciembre y junio próximos, sí es un hecho que a sus 43 años está provocando cambios. "La meta es volver a San Juan. Quiero estar un tiempo con los míos, más que nada. Estuve 25 años en Europa y es hora de vivir otras cosas. Ver envejecer a mi madre, disfrutar más a mis hermanos. Volver a esto es bueno para mí. No digo que regreso definitivamente, pero sí es por este tiempo".
-¿Y no te acostumbraste ya al estilo europeo de vida?
-La sociedad argentina es diferente a la española. Pero yo me adapto a cualquier sitio. Es cierto que en Europa se vive muy tranquilo, el orden en la sociedad es muy diferente pero no estás con los tuyos. Estuve 25 años sufriendo por eso, no importa ahora sufrir por lo otro.
-¿Cómo estás viviendo el hecho que ya sos o pronto serás exjugador?
-Siempre dije que mientras pueda bajar la mirada y pueda atarme los patines que tanto me han dado, lo seguiré haciendo. De momento, no me cuesta bajar la mirada, pero sí me cuesta atarme los patines. Entonces por eso estoy ya en la luz del final del túnel y hay que aceptarlo.
Los proyectos
Por las ideas que tiene como intención de poner en práctica, José Luis Páez no se muestra nostálgico porque una etapa muy importante en su vida está en su ciclo final. Una razón básica de este viaje (además de recaudar información para su hija menor, Paola, que está por terminar el bachillerato en Barcelona y tiene inquietudes de estudiar Psicología en San Juan) es que comenzó a fabricar indumentaria de hockey, con su nombre como marca. "La idea es llegar a Sudamérica. De momento son botas, rodilleras, guantes, sticks. Voy a sacar unas tobilleras también y dentro de poco voy a ver si me meto con las ruedas y plantillas", anunció el multicampeón con Barcelona. Por ahora, los productos se fabrican en España, pero su intención es instalar en el país la fábrica.
-¿Cómo te ves haciendo el anuncio de la campaña si sale todo como esperás?
-Hay una idea, pero es todo muy nuevo. Le estamos dando forma y me dijo mi gestor que hay que aguardar que el nombre sea aceptado y el material funcione. Si se consolida, a partir de ahí habrá campaña publicitaria. Hablarle a una cámara no habrá ningún problema. Ya me defiendo con las cámaras y hablé ante seis mil personas.
-¿Hay otros proyectos relacionados con el hockey?
-Es posible que empecemos, con mis hermanos David y Carlos, a dictar pequeñas clínicas. Con Concepción, la Federación de Colombia y River de Buenos aires ya hemos tenido contactos. Quiero un poco innovar en esto y ayudar en clubes en el aspecto dirigencial sobre todo: una coordinación de todas las categorías, sobre como funciona allá (por España).
Balances
De lo ya vivido a nivel deportivo, José Luis resalta inmediatamente como su mayor alegría el título de campeón olímpico que consiguió con la Selección argentina en los Juegos de Barcelona en 1992, con la recordada final ante España que fue un verdadero partidazo, "increíble e inolvidable", afirmó con un entusiasmo que todavía le perdura. También evoca, sin pedírselo, su máxima tristeza, que no fue una frustración deportiva. "Fue el Mundial de 1999 en Reus, España -relató con un repentino cambio en su rostro-. Gracias a estos grandes directivos, que nos abandonaron totalmente, nos pagábamos nuestra comida, dormíamos en colchones que se le salían los resortes y nos pagamos hasta nuestra indumentaria. Salimos campeones y fue muy triste ver cómo ellos aparecían en las fotos que se publicaban en el país y en Europa".
No es difícil entonces suponer la posición de José Luis Páez en la separación de San Juan y de Mendoza de la CAP: "No puedo saber en este momento si es correcto el trabajo que están haciendo los directivos de San Juan y de Mendoza pero como jugador que soy, voy a estar a la par de ellos porque sé que es por un buen fin".
Páez considera que el hockey sobre patines debe separarse del patín carrera y del patinaje artísitico porque se trata de otro deporte. "¿Por qué no hay un pionero para que este deporte tenga su propia federación? Es mi gran pregunta. Seguramente el día que me muera, si se hizo, será con felicidad". Aunque dejé de jugar, será hockista toda su vida. Esa que está por comenzar a vivir una nueva etapa.

