El cierre de año menos esperado. Y uno de los golpes más duros que San Martín recibió en Primera División. El Verdinegro fue a Rosario buscando cerrar este primer ciclo de la mejor manera, pero el resultado fue impensado: cayó goleado por 6 a 1 ante Newell’s Old Boys por la 14ta fecha del campeonato.
Siempre es duro perder, pero caer por goleada y sin mostrar reacción, duele aún más y llena de preocupación. El leproso rosarino madrugó de entrada con un golpe certero y letal que marcó el destino del encuentro. Iban apenas 55 segundos de juego cuando el legendario Maximiliano Rodriguez se despachó con una estupenda jugada individual, la “Fiera” recuperó en la salida de San Martín tras un error de Fissore y encaró: pasó a dos y tres defensores y definió cruzado ante la salida de Luis Ardente. El 1-0 al minuto fue difícil de asimilar para el Verdinegro que lejos de mostrar algún tipo de reacción sufrió el segundo golpe aún más doloroso a los 14’ con el recién ingresado Figueroa que convirtió con un disparo fuerte a ras luego de una pared de Quignon y Scocco. Si el panorama era negro para San Martín, fue aún peor apenas unos minutos después. Iban 20’ cuando Formica se jugó con Scocco, cuyo remate pegó en el palo y Paulo Aguilar, metió la pelota en el arco cuando quiso despejar. El 3-0 no solo reflejaba la contundencia del local sino remarcaba los errores defensivos de San Martín que solo contó con un remate de Sagarsazu que Pocrnjic tapó con una volada.
El inicio del 2017 tendrá a San Martín recibiendo a Huracán en Concepción
En el segundo tiempo todo el mundo esperaba la reacción de San Martín. Si bien el trámite parecía liquidado, en el mundo verdinegro estaba una mínima esperanza de dar pelea pero con el inicio del juego, la respuesta ya quedaba plasmada en la cancha con el buen arranque del local. Lo tuvo Scocco pero Ardente apareció con lo justo para salvar su arco aunque no corrió con la misma suerte a los 6’, cuando el histórico Mateo convirtió de cabeza un centro desde la derecha y dejó sin chances al arquero sanjuanino.
Dos minutos después Osella sacó a Mateo, quien se abrazó con sus compañeros y saludó al público, anunciándose por los parlantes que el rubio volante dejaba el fútbol. A continuación llegó la reacción de San Martín, que a pura actitud dio muestra con el descuento de Marcos Gelabert al tomar un rechazo, pero el 4-1 que reflejaba aunque sea una mínima muestra de entrega del Santo, quedó en la nada apenas unos minutos después cuando Quignon que tuvo mucha facilidad para combinar juego con sus compañeros, se asoció con Formica y el ex River y San Lorenzo sacó un remate que pegó en el palo, luego en Ardente y se metió para el 5-1. La historia ya estaba decretada y a San Martín solo le quedaba replegarse como para no terminar de una manera peor el encuentro.
Pero Newell’s, nunca frenó su andar y como faltaba el broche final para cerrar la fiesta quien mejor que Nacho Scocco para poner el 6-1 con una definición de emboquillada ante la salida del arquero.
A los 21’ el encuentro estuvo detenido por la pirotécnica que invadió el estadio “Marcelo Bielsa” y cuando el juego se reanudó, por fortuna no hubo más goles. Para el Verdinegro terminó el año. Ahora deberá hacer borrón y cuenta nueva para comenzar el 2017 de la mejor manera.
Sorprendió
Newell’s tuvo una clave fundamental para hacerse dueño del dominio y ese paso lo dio cuando todavía no se cumplía el primer minuto de juego. El madrugón de entrada de Maxi Rodríguez significó un golpe bajo para el Verdinegro.
Sin reacción
San Martín sintió el impacto en lo anímico y nunca mostró reacción como para llegar a descontarle a Newell’s y eso es lo que más llenó de preocupación a todos. El Verdinegro tocó fondo y terminó pidiendo la hora para no terminar de una forma peor.