Como sucede en cada partido de Los Pumas, los sponsors que acompañan al seleccionado y otras empresas le dieron color al fan fest, que en las afueras del Estadio del Bicentenario tuvo regalos, juegos y bastante comida, con cientos de personas agolpadas bajo el Sol de la siesta sanjuanina.
Hacia el sector Norte del gigante de Pocito fueron instalados los food truck y los diferentes stand. Y la oferta para los visitantes fue muy variada. Así, para quienes optaron por comer algo diferente a hamburguesas u otras comidas rápidas, era posible pedir punta de espalda a la llama o sandwichs de bondiola, acompañado por vino y, especialmente, cerveza.
Los chicos, en tanto, la pasaron mejor porque tuvieron diferentes juegos que pudieron disfrutar gratis. Hubo canchitas para patear penales a una H pequeña, también metegoles, jenga con maderas grandes y, para recordar el histórico partido, gigantografías para sacarse fotos.
Además, la mascota de Los Pumas estuvo disponible todo el tiempo e incluso estuvieron los jugadores argentinos que no quedaron en la lista para enfrentar a los Wallabies, interactuando con los fanáticos que buscaban sus selfies.
El lugar estuvo abierto desde temprano y si bien durante el partido mermó la concurrencia, luego volvió a llenarse, esta vez de simpatizantes listos para celebrar el gran triunfo de Los Pumas ante los australianos.