La lluvia que azotó a Mérida repercutió en el mal estado del campo de juego. Ese aspecto resultó clave para lo mal que jugó la Argentina, según varios futbolistas.
“La cancha no estuvo en buenas condiciones y eso lo pagamos caro nosotros”, describió el lateral, Marcos Rojos. Por su lado, el capitán, Javier Mascherano (foto), aseveró que “se nos hizo difícil el traslado y no pudimos conectarnos entre nosotros. Hay que analizar muchas cosas que pasaron porque estar 0-2 abajo es algo que complica demasiado cualquier plan”. Igual, el Jefecito destacó como positivo que “la entrega de todos fue algo importante y, sin dudas, haber rescatado un punto nos pone algo contentos”.
