River no tuvo nada de tiempo para relajarse después del Superclásico contra Boca en la Bombonera, donde igualó 2-2. Es que mañana recibirá a Palmeiras por la ida de las semifinales de la Copa Libertadores. Es por eso que Marcelo Gallardo ya tiene un equipo en mente, muy parecido al que paró en la noche del sábado.
En el cuerpo técnico hay optimismo con respecto a Milton Casco. Según el parte médico publicado por el Millonario después del partido contra Arsenal, el lateral sufre una "molestia muscular en el isquiotibial izquierdo". Al principio se temió que no iba a poder estar en el duelo copero, aunque su buena respuesta en los últimos días volvió a ponerlo en carrera. Ayer entrenó de forma diferenciada y seguramente hoy será exigido para ver cómo se encuentra realmente. En ese sector, Gallardo ya no tiene por otra lesión al ahora titular Fabrizio Angileri, quien sí está descartado para la ida en Avellaneda. En el tema Casco se espera que el cuerpo técnico lo espere hasta último momento, sabiendo que es un lateral izquierdo natural (también se desempeña por la derecha) y evitar improvisar a un central como Pinola por ese costado. Por otra parte, lo de Paulo Díaz ante el Xeneize fue sólo un calambre.
River enfrentará a Palmeiras mañana por la Libertadores y en principio, Marcelo Gallardo pondría a Franco Armani; Gonzalo Montiel, Robert Rojas, Paulo Díaz, Milton Casco; Nacho Fernandez, Enzo Pérez, Nicolás De la Cruz; Matías Suárez, Rafael Santos Borré y Jorge Carrascal. Para esta jornada se espera la última práctica y luego a esperar el gran duelo.
Carrascal, sólo por la cláusula
Jorge Carrascal se sumó al equipo de Marcelo Gallardo en enero de 2019 como un desconocido para la mayoría del Mundo River y en sus primeros partidos con la Banda parecía un chiste su apodo de "Neymar colombiano". Pero el volante, a sus 22 años, se fue ganando la confianza del técnico. Su potencial y juventud empiezan a tentar a los poderosos de diferentes mercados, como sucedió en las últimas horas con el Al Ain de Emiratos Árabes, quien hizo un efímero intento por comprarlo que fue inmediatamente rechazado. La respuesta fue clara: Carrascal sólo se vende por la cláusula de rescisión, de 20 millones de euros.