En Villa Obrera, soñar siempre es posible porque con las banderas de la humildad, el sacrificio y la convicción de que siempre se puede, el equipo de Pepe Bravo volvió a ser noticia en el Argentino B tras vencer como visitante a Atlético de la Juventud Alianza por 2-1 y treparse a la punta de la Zona 4, esperando a lo que Unión hoy haga ante Argentino de Mendoza. Fue una victoria merecida de la Villa que supo reaccionar del golpe inicial que fue el primer gol del partido -obra de Roverbal- y en apenas 5 minutos empató. Ahí, se convenció de que podía más y metió el golpe de gracia con el gol de Federico Amaya que puso el 2-1 que finalmente sería definitivo.

Atlético Alianza tuvo el mejor arranque pero para sus males, apenas eso le duró 10 minutos. Empezó ganando con un error del arquero Araoz que aprovechó Roverbal pero no supo aprovechar esa ventaja. Villa Obrera le metió presión, le quitó la pelota, se le fue encima y desnudó todas las limitaciones defensivas que han condenado este arranque de temporada para el equipo de Santa Lucía. El trío Alvarez, Amaya y Nuñez se movió con soltura y libertad entre los volantes y la defensa Lechuza y no tardaron en llegar las ocasiones para la Villa. A los 15’ Alvarez aprovechó una floja resistencia del arquero Vicente y puso el 1-1 y siete minutos más tarde, el cordobés Amaya metió el segundo gol Villero. Alianza intentó la reacción pero se quedó sin argumentos futbolísticos, pese a que estuvo muy cerca del empate con un remate de Godoy que dio en el travesaño.

En la segunda parte, el Lechuzo volvió a repetir ese mejor arranque con el adelantamiento en la cancha pero no pudo forzar situaciones netas de peligro como para inquietar a Araoz. Todo fue forzado, demasiado rebuscado. La Villa entendió que otra vez era el momento del overol y empezó a trabajar el partido para llevarlo a lo que mejor hace. Así, se acomodó, le cerró los caminos y de contra, pudo haber complicado. Alianza se fue muriendo en su impotencia. La Villa, ya había dado el gran golpe.