La Selección de Irán consiguió una agónica victoria 1-0 en el estadio de San Petersburgo gracias a una jugada fortuita, un gol en contra de Aziz Bouhaddouz, en el primer partido del Grupo B en el Mundial de Rusia. El partido tuvo las mayores emociones durante el primer tiempo y decayó completamente en acciones ofensivas en la segunda parte.
Sin embargo, cuando transcurrían los minutos adicionales y todo parecía encaminarse a un empate, Aziz Bouhaddouz en su afán de desviar el balón tras un tiro libre recostado por izquierda, anotó en propia puerta y otorgó los tres primeros puntos al conjunto persa.
El Grupo B se completa con las selecciones de España y Portugal. Fue la segunda victoria iraní en la historia de los Mundiales tras el triunfo sobre Estados Unidos en el Mundial de 1998.