Inter se quedó con un clásico caliente: venció a la Juventus por 1-0, en un encuentro con varias intervenciones del VAR, en condición de visitante, por la fecha 31 de la Serie A, y se ubicó a tres puntos de Napoli y Milan, líderes del torneo.
Juventus tuvo la iniciativa en la mayor parte del encuentro, pero la visita abrió el marcador sobre el final de la primera mitad, gracias a intervenciones del VAR. Primero, el árbitro revisó una jugada y sancionó penal al advertir un pisotón de Álvaro Morata a Denzel Dumfries.
El arquero Wojciech Szczesny le tapó el disparo desde los doce pasos a Hakan Calhanoglu, pero en el rebote Matthijs de Ligt marcó gol en contra. Sin embargo, el árbitro Massimiliano Irrati revisó la jugada: vio que el propio defensor neerlandés invadió durante la ejecución y definió que debía repetirse. Al segundo intento, Calhanoglu no perdonó: marcó el 1-0.
En la segunda mitad, Juventus buscó el empate por todas las vías y tuvo varias aproximaciones. Entre ellas, un bombazo de Denis Zakaria que dio en el palo. Pero, la visita resistió, defendió la ventaja y festejó.