Buenos Aires, 25 de mayo.- La dirigencia de Boca Juniors
intentará convencer a Carlos Bianchi para que asuma la dirección
técnica del plantel en julio, pese a las reticencias del actual
manager, quien aceptaría recién tras una gestión del sucesor de Carlos Ischia.
Si Bianchi no acepta, recién asumirá como entrenador una vez
que finalice la gestión del técnico que asuma en junio.
La confesión salió de Boca de Marcelo London, junto al
presidente Jorge Amor Ameal, uno de los dos dirigentes de mayor cercanía a Bianchi.
"Toda la comisión directiva quiere que Bianchi sea el técnico y
vamos a tratar de hacer esfuerzos para que dirija Bianchi pero no
creo que lleguemos a convencerlo", sostuvo London por radio La
Red.
Confirmó que Bianchi, de no aceptar el convite, amparándose en
la cláusula que exigió de no ser el sucesor de Ischia, será el que
elija al entrenador y lo pondrá a consideración de la comisión
directiva.
Aseguró el dirigente que el manager aún no dio nombre alguno
para hacerse cargo, pero quien acceda a ese puesto sabrá que tiene la espada de Damocles cayendo desde las tribunas de La Bombonera, que difícilmente acepten el mínimo error del futuro entrenador que desde que inicie su gestión tendrá el carácter de interinato.
Así será por más que London se pregunte qué pasa si el nuevo
entrenador sale campeón.
También asegura el dirigente que después del eventual traspié
del futuro técnico el entrenador "será Bianchi".
Los trascendidos daban cuenta de que Alfio Basile, Gustavo
Alfaro y Jorge Bermúdez aparecían entre los postulantes, pero ante tal extraña situación difícilmente el Coco, campeón de varios títulos dirigiendo la azul y oro y con dos etapas en el seleccionado a cuestas difícilmente acceda a aceptar a modo de transición.
Según supo la agencia DyN, Basile tuvo un ofrecimiento para
hacerse cargo del Parma, que pelea el ascenso a la serie A de Italia.
De acuerdo a fuentes de la negociación, la primera reacción de
Basile fue que hablarán en el caso de que Parma vuelva a Primera.
London, por su parte, confirmó que anoche la directiva e Ischia
llegaron a una decisión "consensuada" para que termine su gestión
el 30 de junio y se le pagará lo que resta del contrato hasta el
31 de diciembre.
También acordaron que si en el interregno del último semestre
de este año Ischia consigue otro equipo para dirigir, Boca pagará
la diferencia entre el contrato actual y el que firme con el nuevo
club.
"Cuando contratamos a un técnico no le pedimos que salga
campeón pero que compita hasta la última fecha y no ha pasado eso en los dos campeonatos", dijo el directivo en referencia al actual Clausura y la Libertadores.
Como Ischia se había negado a renunciar y dejó la pelota en
manos de los dirigentes, con el costo público de echar al entrenador, anoche acordaron la salida salomónica.
"El técnico dice que de doce puntos pude sacar doce puntos y
tras una relación de un año y medio quisimos terminar de la mejor
forma posible", cerró el dirigente.
En tanto, el plantel que viene de perder con Vélez, volverá a
verse las caras en el entrenamiento de mañana en Casa Amarilla, con Ischia como conductor de corto plazo.