El combinado nacional debió ir a disputar el Mundial de Italia con un conjunto totalmente amateur ya que la Asociación de Clubes Profesionales no estaba afiliada a la FIFA y no quería prestar sus jugadores para el máximo certamen a nivel de selecciones. Como consecuencia las ligas del interior abastecieron a a la selección y allí San Juan aportó el único jugador que haya disputado un mundial: el defensor de Desamparados José Nehín.

La selección dirigida por Filippo Pascucci debutó (y se despidió) el 27 de mayo de 1934 ante Suecia en el Stadio del Littoriale en Bolonia y formó con: Héctor Freschi (Sarmiento de Resistencia Chaco); Arcadio López (Sportivo Buenos Aires), Ernesto Belis (Defensores de Belgrano), José Nehín (Sportivo Desamparados de San Juan) y Juan Pedavilla (Estudiantil Porteño); Constantino Sosa (Godoy Cruz de Mendoza) y Federico Wilde (Unión de Santa Fe); Francisco Rúa (Sportivo Dock Sud), Roberto Irañeta (Gimnasia y Esgrima de Mendoza), Alberto Galateo (Unión de Santa Fe) y Alfredo Devincenzi (Estudiantil Porteño).

El conjunto argentino empezó ganando a los tres minutos con el gol de Ernesto Belis. Seis minutos después los europeos empatarían el partido con el tanto de Sven Jonasson. Ni bien comenzado el segundo tiempo Alberto Galateo devolvió a la Argentina a la victoria. A los 67 minutos Jonasson volvió a poner la paridad en el marcador. Faltando 10 minutos para el partido Knut Kroon determinó la victoria de Suecia y la eliminación de los argentinos ya que, desde la primera vuelta, todos los partidos eran eliminatorios. Así Argentina quedaba afuera del Mundial de Italia en primera ronda.