Inglaterra, 14 de septiembre.- En el minuto 63 de juego, Valencia escapaba por la punta derecha y fue interceptado por un rival, quien le interceptó la pelota limpiamente, pero desafortunadamente para el ecuatoriano, su tobillo izquierdo quedó debajo de la cintura del jugador del Rangers, lo que le provocó una fractura ante la desesperación de todos los jugadores que pedían por el auxilio del volante derecho.
El jugador se retiró del estadio con una mascarilla de oxígeno sobre su rostro, debido al incesante dolor que lo aquejaba y que lo hizo romper en llanto. El partido terminó empatado sin goles, pero eso fue apenas una estadística al lado del mal momento del futbolista ecuatoriano.
Su entrenador, Alex Ferguson, destacó al final del partido: "Es una mala (lesión), lo mantendrá fuera del terreno de juego durante bastante tiempo. Al parecer clavó la punta de la bota en el césped".