Un preciso puntazo del estratega Erik Lamela le permitió anoche a la Argentina ganarle 1-0 México, en Medellín, y debutar con una sonrisa en el Mundial Sub-20 de Colombia. Los dirigidos por Walter Perazzo cumplieron una aceptable actuación en su primer encuentro, del grupo F y tuvieron en Lamela a su punto más alto y mejoraron claramente cuando en el comienzo del segundo tiempo ingresó el habilidoso Juan Manuel Iturbe.

Argentina mostró ratos de buen juego, sobre todo cuando la pelota pasó por los pies de Lamela, aunque al equipo de Walter Perazzo le faltaron al principio otros recursos que acompañen al desequilibrio de la flamante incorporación de la Roma italiana. Por afuera, los albicelestes llegaron y le ocasionaron peligro a la defensa mexicana, con los desbordes de Roberto Pereyra y Adrián Martínez.

México explotó la velocidad de Ulíses Dávila y por momentos desnudó falencias en el equipo argentino, en especial a las espaldas del “doble cinco”.

Argentina mejoró en ofensiva con el ingreso de Iturbe, porque Lamela tuvo un compañero en su misma sintonía para descargar. A los 25, Lamela recibió de espalda a poco de pasar la mitad de la cancha, y avanzó hacia al área. Antes de pisar la medialuna, definió de “puntín” al lado del palo izquierdo, bajo la sorpresa del arquero rival y de los defensores que lo seguían, para definir el partido.