El suizo Roger Federer entregó ayer otra dosis de su inagotable talento y superó al español Rafael Nadal, en dos sets, para adjudicarse por tercera vez en su carrera el Masters 1000 de tenis de Miami, el certamen sobre cemento que repartió premios por 6.993.000 dólares.
El jugador oriundo de Basilea, de 35 años, dio una auténtica lección de cómo emplear todos los recursos disponibles de su mano derecha, a través del drive, del revés o del servicio mismo, para imponerse al zurdo de Manacor, de 30, por un inapelable 6-3 y 6-4, en una hora y 35 minutos de juego en el Crandon Park de Key Biscayne.
El suizo descontó la estadística personal que mantiene con el español (séptimo en el ránking mundial), que ahora domina por 23-14. Pero Federer tiene el hándicap que lo derrotó en los tres enfrentamientos de la temporada, pues anteriormente le había ganado las definiciones del Abierto de Australia y Masters 1000 de Indian Wells.
Federer se consolidó también en la tercera posición como el más ganador de certámenes en la historia de los ATP, quedando a tres del registro que alcanzó el retirado checo Ivan Lendl (94). Un poco más lejos está el astro de los ’70 y ’80, el norteamericano Jimmy Connors (109).
Desde el comienzo del partido, el suizo, con mayor cansancio que su rival por la maratónica semifinal ante el australiano Nick Kyrgios, buscó la agresividad desde su servicio y con su derecha quirúrgica que hizo complicadas las devoluciones del español desde el fondo.
Nadal logró conservar su saque en los games 4 y 6 con cierto esfuerzo, para mantenerse 3-3, por ejemplo. Sin embargo, en el octavo juego, Federer aprovechó el ’punto de quiebre’ y se adelantó por 5-3 para luego coronar el set con su servicio.
Federer estuvo intratable y no le dio chances. Tampoco en el segundo parcial, que enderezó a su favor en el noveno game, cuando quebró el servicio con un revés paralelo y se anticipó 5-4 en la pizarra.
El mallorquín ya no tenía resto físico, tenístico ni mental como para dar vuelta la historia, que se completó al game siguiente, con un Federer que resolvió el pleito, cuando una pelota del español se fue larga.
Roger, incrédulo
“No puedo creer este comienzo de año. Quiero agradecer a todos los que alientan alrededor del mundo”, destacó Roger Federer luego de levantar el trofeo del Masters 1000 de Miami.
“Un triunfo más contra Rafa, estoy feliz y disfruté mucho del partido.
Es un jugador muy fuerte y siempre son partidos épicos con él. Acá empezó todo para nosotros, cuando él era joven y me tocó enfrentarlo”, contó Roger, y agregó: “Es una linda parada Miami, tengo que agradecer especialmente a mi equipo”.
“Siento que ya no estoy de regreso, ya es el nivel que pretendía desde que volví al circuito. La salud es lo más importante y por eso valoro tanto este momento”, celebró el Expreso.
PALABRA DE SUBCAMPEÓN
Nadal: “Otar vez el trofeo más chico”
Con una sonrisa, pero sin disimular su lógico fastidio por caer en otra final, Rafael Nadal comentó ayer que “otra vez el trofeo más chico es para mí”.
Al referirse a sus sensaciones, el zurdo contó que “pasé dos semanas muy buenas pero perdí por tercera vez con Roger en este año. Espero no tener que esperar otros tres años para llegar a la final en Miami. Gracias a todos por el apoyo”.
Y luego destacó que “a los latinos que estamos aquí, sólo decir muchas gracias por el cariño y apoyo, cuando juego en Miami y todo Latinoamérica. Voy a seguir jugando y espero conseguir títulos. Siento que estoy en muy buen nivel para ganar finales, pero me está tocando Federer en ellas y se hace duro”.
Igual manda
Pese a la caída ayer en la definición del Masters 1000 de Miami, Rafael Nadal sigue arriba en el mano a mano ante Roger Federer en finales. Lo supera hasta el momento por 14 a 9. Aunque este año cayó en dos cruces por el título. Al de la jornada de ayer hay que sumarle la final en el Abierto de Australia.