Hay una celda en la cárcel de Bouwer, en las afueras de la ciudad de Córdoba, que tiene nombre y apellido: Ángel Cabrera. Está preparada desde hace varios meses y todo indica que llegó el momento de ocuparla. Es que la Justicia brasileña aceptó en las últimas horas el pedido de extradición para que el golfista sea enviado de vuelta a la Argentina en los próximos días para ser juzgado en múltiples causas por violencia de género contra sus antiguas parejas. El ex ganador del Masters de Augusta -entre otros prestigiosos trofeos del deporte- estuvo prófugo durante varios meses en Estados Unidos hasta que el 1° de enero de este año fue capturado por Interpol en Brasil y alojado en una cárcel federal de Río de Janeiro, donde aún permanece.
El 14 de abril pasado, Cabrera declaró ante la jueza federal brasileña Débora Valle de Brito y dijo que quería ser enviado rápidamente a Argentina. “Ángel Leopoldo Cabrera aceptó expresamente la extradición simplificada a la República Argentina, según declaraciones rendidas en el tribunal grabadas a través de medios audiovisuales”, dice el documento de la justicia de Brasil al que accedió Infobae.
La aceptación del deportista tiene una explicación sencilla, según fuentes del caso. De nada le sirve estirar los tiempos y permanecer encerrado en una cárcel lejos de su país sin nadie que lo pueda visitar ni llevarle cosas. Sus allegados coinciden en que prefiere esperar los juicios en una cárcel cordobesa. Además, según sus abogados, en el último tiempo empezó a sufrir diversos problemas de salud que requieren una atención especializada: comenzó a orinar con rastros de sangre.
Una vez que Cabrera pise suelo argentino se reactivarán los tiempos de las diversas causas en su contra. En total son tres las ex parejas que lo denunciaron por golpes, insultos y amenazas. En las últimas horas la agente de policía con quien “Pato” fue pareja durante casi dos años, se presentó nuevamente en la Justicia y realizó otra acusación.
Según pudo reconstruir este medio, la mujer recuperó de su celular un video de hace algún tiempo que muestra que es agredida por Cabrera y donde la amenaza claramente: “Vas a terminar en el cementerio”, le grita. Ese material ya fue aportado a la Justicia cordobesa que inició una nueva causa por amenazas.
Hay quienes esperan con ansias ver a Cabrera atravesar la puerta de los tribunales cordobeses. Por un lado, la Cámara 2° con la fiscal Laura Battistelli, y por otro, el fiscal de instrucción Cristian Griffi que acumula casi una decena de demandas contra el golfista.
El penal de Bouwer, el nuevo hogar de Cabrera apenas sea enviado a este país, no cuenta con las mismas comodidades que supo disfrutar en sus recorridas por los mejores torneos del planeta. Se trata de un complejo dividido en 4 módulos compuestos por pabellones y celdas individuales que alberga a detenidos procesados (el caso de Cabrera) y condenados. El golfista podrá pasar el tiempo más fácil si se anota en alguno de los talleres disponibles como el de herrería, tornería, tapicería y hasta puede aprender a hacer una huerta.
En los últimos años esa cárcel fue noticia por distintos hechos que van desde golpizas a internos, presos muertos, reclamos por parte de los alojados y hasta el desbaratamiento de una banda que, desde el interior mismo del penal, habían montado una estructura para realizar estafas telefónicas a beneficiarios del IFE durante el año pasado.
Cabrera podrá recibir visitas en la cárcel de Bouwer, aunque no son muchas las personas con las que aún mantiene contacto. Según pudo saber este medio desde que está alojado en Brasil, solo se contacta telefónicamente con su hijo, su abogado Carlos Hairabedian y su manager Manuel Tagle.
Según lo que expresa lo acordado por ambos países, una vez que el proceso de extradición sea homologado por el juez de Brasil correrá un plazo de 45 días para que el detenido sea enviado a Argentina. “Lo que se está viendo es cómo se sortea el difícil problema de que las fronteras entre ambas naciones están cerradas por la pandemia, por lo que prácticamente no hay vuelos. Esperemos que en ese plazo se pueda solucionar, si no habrá que buscar alguna otra solución, pero lo fundamental es que la jueza ya firmó y Cabrera vendrá a Argentina en los próximos días”, explican desde uno de los tribunales donde deberá ser juzgado.
(Fuente: Infobae)