Maratónica. Así como es su vida diaria en Capital Federal, así se dieron las horas siguientes a su consagración en el "Deportista del Año". Juan Hierrezuelo tras coronarse antenoche en la elección de DIARIO DE CUYO retornó rápidamente a Buenos Aires y desde allí, expresó su alegría por el premio obtenido y analizó su gran año deportivo.
"Fue algo muy importante poder quedarme con el premio. Es algo único. Por más que no esté todo el año en la provincia significa mucho que me reconozcan así, estoy muy agradecido con toda la gente de San Juan, en especial con DIARIO DE CUYO por mantener vigente esta iniciativa. Este logro sirve para poder cerrar un gran año para mí", contó el joven de 18 años que tuvo como resonante victoria haber obtenido el oro en los Juegos Olímpicos de la Juventud realizados en Buenos Aires. El pibe surgido en Ausonia y actual jugador de San Lorenzo hizo un viaje "relámpago" para poder estar en la gala del "Deportista del Año", llegó al mediodía y prácticamente no paró. Pasó pocas horas con su familia y después de la consagración, brindó con las autoridades y partió a una cena sorpresa que su familia le había preparado ya en la medianoche. Durmió un par de horas y a las 5 de la mañana ya estaba rumbo al aeropuerto de Las Chacritas. Llegó a Buenos Aires y pasó directo al colegio donde tenía que rendir Filosofía. Recién en la siesta pudo descansar un par de horas.
"Es una caricia al corazón que te reconozcan por lo que uno hace. Este año fue una locura para mí, no paré un segundo. Es lindo tener este tipo de reconocimiento porque capaz que no se ve desde afuera, pero uno deja muchas cosas de lado para estar a este nivel. A mí me tocó dejar a mi familia y mis amigos en San Juan. Siempre tuve muy en claro que para ser profesional tenés que dejar muchas cosas de lado", manifestó el chico haciendo referencia al precio que tiene que pagar para triunfar en el deporte que ama. Es que Juan se abrazó al deporte desde chico y es tan profesional que prefiere dejar de lado cosas que haría cualquier otro adolescente. "No salí muchas veces a bailar, no sé si me gustaría o no porque son cosas que pocas veces hice. Si voy a algún lugar tengo que volver temprano porque entreno todos los días, entonces me levanto temprano los siete días de la semana", contó y en ese sentido también aseguró que la alimentación es clave en un deportista: "Me cuido mucho en las comidas. No hago dieta estricta pero como sano y siempre consumo la cantidad diaria de proteínas y calorías que me corresponde".
Esa forma de llevar su carrera deportiva a tan corta edad y ese profesionalismo que le aplicó el Ciclón fue clave para ser considerado una fija en la Selección nacional. Con la Albiceleste logró en octubre pasado coronarse en los JJOO de la Juventud y, más lo realizado en San Lorenzo de Almagro, lo llevaron hace una semana a ser premiado con el premio "Jorge Newbery" por ser el deportista más destacado de Buenos Aires compitiendo con deportistas de 60 federaciones. "Este año es único. Es el año que me está impulsando a mi carrera. Después de tantos logros se me abren más oportunidades pero tengo que aprovechar la chance de seguir creciendo porque tengo todas las herramientas necesarias para hacerlo", manifestó con total madurez Hierrezuelo y si bien su sueño es emigrar a Europa, él tiene los pies sobre la tierra: "Si bien hay propuestas no son del todo seguras, por ahí arriesgás y te vas y si no te va bien nada vuelve a ser igual. Hay que saber cuándo es el momento justo. Estoy tranquilo", cerró Juan Hierrezuelo, el pibe más importante para el deporte de San Juan.
Su pasado
El tenis, en el olvido
Juan Hierrezuelo vivió su niñez en las cercanías de Ausonia. Allí practicó tenis hasta que a sus 13 años motivado por sus 2,08 metros de altura se metió en el básquetbol y no paró. A los 15 lo fichó el Ciclón y allí ya es una fija.