Terminaron tirándose todos arriba de su estrella y héroe: Roc Pujadas. El pibe (nro.7) fue el autor de ese gol que le dio a España -faltando menos de dos minutos- el triunfo en la semifinal y clásico europeo ante Portugal. Fue victoria española por 3-2 que le sirvió paras instalarse en la final de "su" campeonato. A su vez Portugal, que estaba invicto, se quedó con las ganas de repetir el título que había ganado en China.
El primer tiempo salió electrizante y de gran nivel. Es que ambos se atacaron con insistencia, sin guardarse nada. Portugal fue astuto en los primeros minutos porque, con su orden, llegó al gol. Fue luego de una jugada preparada que tuvo una asistencia perfecta para que Joao Pereira la mandara al fondo. Fue antes de los tres minutos y cambió las expectativas de ambos.
Es que Portugal, aprovechando la ventaja, se retrasó. Y los locales, nerviosos, empezaron a atacar. El partido se hizo de tome y traiga. Los dos llegaron con posibilidades lo que derivó que los arqueros se destacaran. Parecía que el primer tiempo se iría con la mínima ventaja para los lusitanos pero España, de tanto esforzarse, tuvo su premio. Llegó al empate a través de su capitán Roc Pujadas. Y estaba bien por lo que habían dado los dos.
En el complemento el local empezó con más bríos y tuvo la chance de pasar adelante pero perdió un libre directo. Algo que no desaprovechó Portugal, que tuvo el suyo y pasó al frente 2-1. Pero la alegría le duró apenas un minuto porque Ramírez lo empató por una distracción de la defensa lusitana.
De ahí el partido entre en un trámite mucho más estudiado pero los movimientos nunca dejaron de ser electrizantes. España pudo pasar al frente pero el arquero Edo atajó otro libre directo. En la recta final del partido todo era parejo y se vislumbraba el alargue pero, cuando no, apareció Pujadas y le dio la victoria y la final a España a menos de dos minutos para el final.