Gonzalo Molina busca ir a los segundos Juegos Olímpicos de su trayectoria dentro del BMX. Tras su paso por ‘Río 2016‘, donde quedó eliminado en la fase de clasificación, el Chalo apunta a estar en ‘Tokio 2020‘, previsto a priori para mediados del próximo año debido a la postergación por la pandemia mundial del coronavirus.
En ese sentido desde hace un mes y medio atrás se encontraba entrenando a pleno, tras superar la primera cuarentena. Pero como la provincia debió volver a la Fase 1 hace unos diez días es que el piloto también debió frenar las prácticas. “Este es un golpe más duro que el primero: sentía que estaba tomando ritmo de nuevo, agarrando la elasticidad y potencia arriba de la bici, pero todo se paró de nuevo. A nivel mental es muy complicado y desmotivante”, graficó el Chalo, de 25 años, y quien por ahora es el argentino que se estaría clasificando a los Juegos. Es un lugar que disputa con otros dos colegas: el mendocino Federico Villegas y el riojano Ezequiel Torres. De los tres, el rawsino es el mejor ubicado, aunque restarían disputarse más fechas para sumar puntos y definir la situación. “En casa tengo algunos elementos como el rodillo y pesas, pero es un entrenamiento no intenso y lejos de la exigencia que tengo que tener”, expresó.
Debido a la incertidumbre que hay por el Covid-19, es que el sanjuanino reveló que llegó a charlar con el entrenador de la Selección argentina, David García, quien le monitorea todo desde Buenos Aires, la chance de ir a competir afuera del país. “Hay chicos de Europa que ya están disputando hasta campeonatos nacionales. Se hace difícil ser competitivo contra ellos y más aún con las diferencias que hay en todo sentido”, puntualizó. Molina explicó que una preparación para unos Juegos implica de base seis meses y por eso los tiempos todavía le dan, aunque “es una carrera contrarreloj”.
Expectativa
El sábado en la provincia se espera que vuelvan algunas actividades tras salir de la Fase 1, aunque el deporte no. Habrá que esperar si el Chalo Molina, por ser deportista olímpico, cuenta con un permiso "especial" teniendo en cuenta su preparación.