Buenos Aires, 20 de enero.- Un mal arbitraje de Javier Ruiz y
dos penales convertidos por Cristian Lucchetti le permitieron
esta noche a Banfield celebrar un 2-0 ante Arsenal en el Estadio
Florencio Sola.
En la primera sanción drástica que tomó Ruiz quedaron dudas
acerca de si hubo una infracción contra el uruguayo Santiago Silva, pero en la segunda el error de Ruiz fue enorme, ya que lo que había hecho Cristian Campestrini era una tapada impecable.
El arquero Lucchetti aprovechó las dos chances que tuvo para
rematar desde los doce pasos y generó con sus aciertos una dosis de tranquilidad que alivia la situación del entrenador Jorge
Burruchaga.
En cambio, Arsenal continúa una caída libre que comenzó cuando
estaba en la cima del torneo Clausura.
Banfield tomó la iniciativa, pero le faltaron recursos para
elaborar juego ofensivo.
El mejor del local fue Walter Erviti, quien se estacionó por
la izquierda y con sus desbordes complicó a la defensa rival.
Por su parte, Arsenal fue cauto y se paró de contra para
aprovechar la velocidad de los delanteros Luciano Leguizamón y Mauro Matos.
A los 13 minutos se generó la primera ocasión de peligro,
porque remató Carlos Espínola y Lucchetti sacó al córner.
Banfield tuvo más tiempo la pelota, pero no podía desquilibrar
a la defensa bien plantada de Arsenal.
Se jugaba el minuto 28 cuando Erviti llegó al fondo y tiró el
centro atrás para el uruguayo Santiago Silva. El delantero definió
y el arquero Cristian Campestrini desvió la pelota al córner.
Finalmente, a los 42 se dio una jugada clave en el encuentro.
Ariel Broggi tiró un pelotazo desde la izquierda y tanto Silva
como Matellán se venían tomando. Ruíz cobró penal y, a los 43,
Lucchetti abrió el marcador.
En el comienzo del segundo período Banfield cuidó el balón,
pero lo hizo en campo del oponente.
Recién a partir de los ingresos de Franco Jara y Facundo Sava,
ambos a los 18 minutos, los de Sarandí consiguieron arrimarse al
área del Taladro, pero les faltó por lo general profundidad.
En una réplica aislada Ruiz castigó en forma equivocada a
Caspestrini y transformó lo que era una gran atajada en la chance
ideal para que Banfield estableciera el 2-0.

