Aquel compromiso de contención social que asumió Marcelo Becerra hace más una década con los humildes chicos de Santa Lucía, hoy en día se escurre entre sus manos. Es que la falta de recursos económicos puso en jaque la subsistencia del club que el mismo fundó: Defensores de Argentinos. No obstante, no está dispuesto a abandonar el barco. No al menos sin golpear puertas para que cientos de chicos mantengan la posibilidad de algo tan importante como es la práctica de un deporte.
Con un puñado de niños que se juntaba a jugar al fútbol en la zona norte del departamento santaluceño, nació el 30 de abril del 2000 el club que desde hace 3 años participa en la B Local de la Liga Sanjuanina de Fútbol. Tras los primeros pasos en la canchita prestada por la fábrica de vidrios Cattorini, ni la Comisión Directiva ni los jugadores pudieron cumplir con el anhelo de la sede propia. Producto de esto, de la falta de dinero, tuvieron que trasladarse reiteradas veces para continuar con las actividades. Además, los jugadores de Primera y Cuarta División todas las fechas juegan de visitantes y se prestan el único juego de camisetas que poseen.
Hoy más de un centenar de chicos practican en una cancha alquilada ubicada en la calle Roger Ballet, a la altura de Colón. Y a pesar de las rifas y de los bingos las cuentas para del día a día no cierran: solo se acumulan deudas. “Tenemos Personería Jurídica, podemos recibir subsidios, pero no tenemos plata para un contador”, señaló Becerra que además de ser fundador del club es el Presidente y profesor de la escuelita de fútbol. Triste y lamentable a la vez porque el segundo hogar de un centenar de chicos se viene abajo. Junto con ello ciertas actividades fundamentales para el crecimiento de los mismo como las clases de apoyo escolar, el ropero comunitario que poseen, la Copa de Leche que reciben y las clases de gimnasia que aprovechan los adultos de la zona. “Esperamos que nos cedan un terreno. Estoy dispuesto a hablar hasta con la Presidenta (Cristina Fernández) si es necesario”, cerró Becerra.

