A dos meses de cumplir 56 años de vida, Arsenal consiguió agrandar un poco más su historia, esa que tenía a nivel títulos la Copa Sudamericana del 2011, la Suruga Bank del 2008 y el Clausura de este año, logro por el cual el conjunto de Sarandí definió la Supercopa Argentina ante Boca, campeón de la primera edición de la Copa Argentina. Luego de la definición por penales que le dio el título al club que fundó Julio y Héctor Grondona en la década del 50’, varios de los futbolistas mostraron su alegría con lágrimas en los ojos. Un caso marcado fue el héroe en los penales, el arquero, Cristian Campestrini: “Mi mujer, Agata, me dijo hoy (por ayer) que podía ser una gran noche. Estoy muy feliz por este logro, que nos ayuda mucho para recuperar la confianza. En el torneo Inicial no estamos bien y este título nos va a poder dar el impulso que necesitamos”, contó el cuidapalos.

Por su lado, el técnico de Arsenal, Gustavo Alfaro, remarcó que “lo hablamos antes del partido con los muchachos: era un partido especial para nosotros, donde debíamos volver a ser el equipo que salió campeón hace solo un par de meses. Me quedo con que conseguimos ese objetivo”.

Mientras que el actual presidente de Arsenal, Julito Grondona, admitió que ‘’fuimos el mejor equipo durante estos 90’. Lo buscamos en todo momento y si no lo pudimos ganar fue porque faltó puntería y un poco de suerte. Hubo que sufrir en los penales, pero la alegría es más que justa para nosotros. Esto hay que disfrutarlo y seguir trabajando’’.