San Lorenzo, cuando peor la pasaba, metió un golpe de nocaut, batió a Racing Club con un valiosísimo 2-1 en el Nuevo Gasómetro (el gol decisivo lo anotó el sanjuanino Emmanuel Mas) y acecha a dos puntos de distancia a Boca, que es el único líder del campeonato de Primera División.
Mauro Cetto, de cabeza, a los 20’ del primer tiempo, y Emmanuel Mas, a los 34’ del segundo, fueron los autores de los tantos para el Ciclón, mientras que Iván Pillud, a los 32’ de la segunda mitad, había aportado el empate provisorio para la Academia.
Con este resultado San Lorenzo es el único escolta de Boca en el certamen, con 53 unidades, mientras los xeneizes totalizan 55.
El equipo de Bauza manejó la pelota en el primer capítulo y dominó al adversario de turno a partir de la labor de Ortigoza, Mercier y Blanco en la mitad de la cancha, aunque necesitó de una acción originada con pelota parada para ponerse en ventaja a los 10’ de juego. El tiro libre ejecutado por el uruguayo Cauteruccio desde la izquierda superó a Saja y rebotó en el travesaño, pero el balón le quedó servido a Cetto, quien de cabeza lo empujó al gol. El tanto fue un premio para la ambición que mostró el local, en contraposición con un oponente por demás especulativo, que concentró sus fuerzas en defensa, a tal punto que dejó desabastecidos y aislados a sus atacantes. Pero el vuelo del anfitrión se vio cortado cerca del final de la etapa por la lesión de Blanco, quien fue sustituido por Rolle.
En la segunda parte, San Lorenzo, ya sin Blanco, perdió el control del cotejo y lo entregó por decisión propia refugiándose cerca de Torrico. Fue así que Racing lo bombardeó al Azulgrana, hasta que Romero ejecutó un córner y tras el rebote Pillud clavó la pelota abajo. A los 34’ en el elenco albiceleste ingresó Milito con la intención de llevarse los tres puntos del Nuevo Gasómetro, pero San Lorenzo salió como una tromba y en una jugada fuera de contexto marcó el 2-1. Cauteuriccio puso un pase punzante de la derecha y el sanjuanino Mas se anticipó dentro del área a Saja para poner la pelota junto al poste izquierdo. Después ya no hubo tiempo para más.

