La derrota 1-0 ante Patronato del domingo por la noche, una más en la temporada, reafirmó el pésimo rendimiento de San Martín jugando fuera de Concepción. Condición en la que nunca pudo ganar y por eso es cómodamente el de peor rendimiento de los 22 equipos que compiten en la B Nacional. Seis derrotas y tres empates lo ubican en el último lugar. Todavía le queda una salida más para cerrar el semestre, que será dentro de dos fechas en Corrientes ante Boca Unidos y que en caso de no ganarlo, cerrará la primera mitad del torneo como el equipo que peores resultados obtuvo siendo visitante, situación histórica por la que nunca atravesó en las 16 temporadas que tiene en la categoría.
Apenas tres empates: ante Villa San Carlos, Almirante Brown y Sportivo Belgrano le dan ese puñado de puntos tan escaso como la cantidad de goles en cada salida, que solamente se reduce a un grito, el de Lucas Salas ante Villa San Carlos, contra los 10 que recibió tras el anotado el domingo en Paraná por José Luis García a los 31’ del segundo tiempo.
Números, porcentajes y rendimiento que lo ponen de cara a su realidad. Esa que fecha por medio lo deja entre los equipos que pueden perder la categoría. Ya que jugando de local es uno, y afuera otro totalmente distinto. Que tiene limitaciones, falta de un conductor, que comete errores que le cuestan puntos vitales para ser el peor y que la chapa de venir de Primera División hace rato que la perdió.
Demasiado para un equipo que se armó pensando en grande, en el regreso, y hoy se debate entre la mediocridad y las cualidades que no suman de varios de sus jugadores. Por eso cambió entrenador, pero con 9 salidas en su haber y 3 desde la llegada del Vasco Azconzábal, la mala racha continúa y va más allá del orientador, del sistema ofensivo elegido y de lo que hace o arriesga el rival.
Hoy ningún integrante del plantel es titular indiscutido como sucedió en otros certámenes. Incluso en varias ocasiones un jugador fue titular y al partido siguiente ni siquiera estuvo entre los suplentes. Lo que marca el presente de San Martín, que está muy lejos del sueño del ascenso y que cada vez retrocede en sus ambiciones, sobretodo cuando sale de Concepción. Condición vital para un equipo con aspiraciones serias.
Tras la derrota ante Patronato, el capitán Cristian Alvarez pintó la realidad: “De visitante nos esta faltando ganar, porque de local somos uno y de visitante otro y eso hay que mejorarlo. Pesa no ganar afuera”. Mientras que Damián Ledesma lo dio otro toque más al presente: “Ya son muchos partidos de visitante en los que no podemos ganar y eso duele, mejoramos pero no alcanza”.
El primer semestre se termina y ya pasó mucha agua bajo el puente, que en cada presentación de visitante se pone más turbia. Le queda una salida con la que cerrará el año, que si la empata o pierde se irá al receso como el último de la lista con una rueda completa sin victorias. No obstante, si gana, será sólo un desahogo que no hará olvidar la realidad de San Martín.