En Jáchal, donde es una especie de dios pagano porque su figura está emparentada al crecimiento y los logros del basquetbol departamental, le dicen "Chato". El apodo tiene que ver con su altura (1,77 mts), baja para el deporte donde eligió invertir su vida deportiva. A los 38 años y con 22 temporadas jugando en Primera División, Claudio Javier Manrique, decidió poner punto final a sus días dentro de la cancha. El Final Four que comenzará ésta tarde será el último torneo oficial de los tantos que jugó y ganó. Y, tratará de despedirse de la afición sanjuanina como lo que fue, un ganador. Al fin de cuentas, son pocos los que pueden darse el lujo de decir que fue campeón con todas las camisetas que vistió. Además, en Jáchal BB está invicto, ganó todo lo que jugó en la provincia.
En realidad no con todas, hubo una con la que no pudo serlo. La de su querido Urquiza. En las otrora desniveladas baldosas (ahora cuidada superficie de granito) del "Negro" empezó a dar rienda suelta a sus sueños con la pelota naranja el hijo menor de Nicanor y Chichi, vecinos de la señera entidad de Concepción. Al Benjamín de la familia cuyo jefe es quien fuera un destacado árbitro de fútbol, le quemaba la cabeza llegar a jugar en la Liga Nacional.
Sus hermanos mayores, Fabián y Carlos, también practicaban. El mayor fue un destacado jugador con paso por entidades de otras provincias. El segundo orientó su pasión por la dirección técnica y tuvo el orgullo de dirigir a sus hermanos.
Claudio fue promovido a la Primera de Urquiza por "Pichi"Juárez, una especie de emblema del club. Corría el año 1996, en un cuadrangular final, en el que Urquiza quedó eliminado por Lanteri. Por entonces, Carlos Yanzi seguía regalando su magia en Inca Huasi y Rodrigo Borghetti, nacido en Lanteri, encabezaba el crecimiento de Banco Hispano.
Con 18 años tuvo el orgullo de enfrentar en un Nacional sub-23 a "Chapu" Nocioni y Pablo Prigioni, luego integrantes de la "generación dorada" del básquetbol argentino.
Aportó lo suyo para que en 2013 Estrella volviera a ser campeón luego de 35 años.
Después de pasar por Argentino Palmira de Mendoza, Noar Sioni y Maccabi en Córdoba, jugar con Lanteri una Liga Argentina B en 1999 en 2002 Claudio Manrique hizo realidad su sueño: con la camiseta de Andino de La Rioja jugó en la Liga Nacional de Primera división. Fueron dos temporadas, en la primera con un triple suyo faltando 3 segundos el elenco riojano -que en esa fase de permanencia fue local en San Juan- inició de manera positiva su serie ante Ferro Carril Oeste, al que luego derrotó 3-2 y mantuvo la categoría.
Por su altura estuvo condenado siempre a ser base. Pero Manrique no era un base más, de esos ágiles que quitan y distribuyen. Era un base con gol. Fueron muchas las siestas y mañanas que, en solitario, ensayó tiros de larga distancia en la canchita de Urquiza.
Su convicción lo llevó a ser un "petizo" temible desde fuera de la llave. Su inteligencia en ser indescifrable para sus rivales que debían marcar a los posibles receptores de sus pases. Su fe le permitió mover montañas de gigantes encarando el aro con gran determinación en perforaciones que en la mayoría de las ocasiones terminaban en dobles.
Hoy empieza a despedirse el hombre al que no le hizo falta gritar para ser caudillo. El jugador al que le alcanzó y sobró, con su calidad, para ser la voz cantante en cada equipo donde jugó y brilló.
Claudio tira y emboca 3 de 3
– ¿A quién le agradecerías?
– A mucha gente, especialmente a mi familia. A mi mujer Natalia, a mis hijos Pía, Máximo y Juan Cruz. A mis padres, hermanos y a toda la gente que me ayudó en distintos clubes a que pudiera ser feliz jugando al basquetbol.
– ¿Jáchal es tu lugar en el mundo?
Sí, me siento muy cómodo. Me tratan como si me conocieran de toda la vida. Le estoy muy agradecido a Javier (Salas, presidente del club) a la comisión y a todo el pueblo que adoptó el basquetbol como su deporte prioritario.
– ¿Cuál es el siguiente desafío?
– Terminar de capacitarme como entrenador para poder dirigir Primera. Mi deseo es seguir afianzando el basquetbol en Jáchal y dentro de un par de años presentar en las competencias un equipo con 8 o 9 de 12 jugadores jachalleros.
El cuadrangular
Con los partidos: Jáchal vs. Lanteri (18:30) y Ausonia vs. UVT (20:15) que se jugarán hoy en la cancha de Ausonia, comenzará el Final Four. El martes Jáchal recibirá a UVT (21:45) en el Papa Francisco y el miércoles, Ausonia será local de Lanteri (21:45). La fecha final se disputará en Jáchal en horarios y día a confirmar.
Año Entidad
1996 Urquiza
1997 Argentino Palmira (Mza)
1998 Noar Sioni (Cba)
1999 Maccabi (Cba)
2000 Lanteri (Liga B)
2001 Lanteri (Liga B)
2002 Andino (La Rioja) Liga A
2003 Andino (La Rioja) Liga A
2004 Lanteri
2005 Urquiza
2006 UVT
2007 UVT
2008 Del Bono
2009 Del Bono
2010 Del Bono
2011 Soc.Española (San Luis)
2012 Soc.Española (San Luis)
2013 Sporting Estrella
2014 Del Bono
2015 Jáchal BB
2016 Jáchal BB
2017 Jáchal BB
2018 Jáchal BB