En su edición de ayer la revista "The Ring" informó que la pelea exhibición entre los ex campeones mundiales de peso pesado, Mike Tyson y Roy Jones Jr., fue pospuesta para el próximo 28 de noviembre. Originalmente, el show tenía fecha de 12 de septiembre. Según el reporte de "The Ring", todavía se espera que la pelea se lleve a cabo en un Dignity Health Park, sin gente, en Carson, California y aun será televisada por pay-per-view.
La razón principal de mover la fecha de la pelea fue que el "equipo de Tyson sintió que podían maximizar los ingresos reprogramando. Recientemente se celebró una reunión entre ambas partes y Jones aprobó el cambio".
El tema de que si usaran cabezales en la pelea volvió a ser un punto discutido con la Comisión Atlética del Estado de California (CSAC en sus siglas en inglés). Todo indica a que la CSAC permitirá que los peleadores realicen la exhibición sin cabezales. Quien se pronunció públicamente en favor que utilicen los protectores para evitar cortes es el presidente del Consejo Mundial de Boxeo, Mauricio Sulaiman, pero no fue escuchado.
También, se reportó que la Asociación Voluntaria Antidopaje (VADA) entró en negociaciones para administrar pruebas de drogas al azar para la pelea.
El oficial ejecutivo de CSAC, Andy Foster, dijo previamente a los reporteros que Tyson-Jones no sería más que una dura sesión de sparring y que esta prohibido que los boxeadores se lastimen seriamente. Pero, Roy Jones ha expresado su preocupación públicamente. "Andy Foster no puede controlar a Mike una vez que Mike sube al ring. Tengo que defenderme como si estuviera en una pelea real", dijo Roy Jones a Yahoo Sports. "Si Mike sale y decide empezar a tirar a matar, ¿qué se supone que debo hacer?".