Es una frase que se inmortalizó con el paso del tiempo, en gran medida por la boca de quién sostiene la historia que salió, nada menos que Juan Domingo Perón. "Mejor que sosobre y no que fafalte". Vaya si en San Martín la temporada pasada hubo anemia de delanteros que se tutearan con la red del arco rival. Para ésta nueva campaña, ya con Enrique Hrabina al mando, la cosa es bien distinta tras los dos primeros juegos. Ya Tonelotto, Cuevas y Penco se sacaron la presión de marcar sus respectivos goles, en algo inédito para tres atacantes del Verdinegro en los inicios de temporada en las quince participaciones que suma el club en la categoría. Aunque si bien el abanico de alternativas es grande para el DT, el domingo se inclinaría por devolverle la titularidad al Chivato, quien hará dupla con el capitán. Es decir, la misma ofensiva que en el estreno ante Platense.

"Diría que además de los seis puntos que ya sumamos, el tema que tres de los delanteros hayamos podido anotar es lo más importante a nivel futbolístico. Pasa que así el resto del equipo está tranquilo sabiendo que los delanteros estamos derechos con el arco", analizó Tonegol, autor del tanto de la victoria ante el Calamar y que le permitió igualar con 28 anotaciones a Alejandro Ortiz, en el segundo puesto de la tabla de máximos goleadores de San Martín en la B Nacional.

El entrerriano debió jugar la semana pasada en soledad en ataque, algo que parece se va a modificar para recibir a Boca Unidos de Corrientes. La intención del Ruso sería poner otra vez de movida a Cuevas, quien está pasando un buen momento y que fue el máximo artillero del plantel la campaña anterior con siete gritos. "Creo que el mérito más importante de los tres delanteros -afirmó Cuevas- es que estuvimos acertados en las chances que tuvimos. Por ahí, otras veces uno está cruzado y no saca provecho de las ocasiones" y agregó "para un atacante el tema de anotar un gol es vital. Cuando no lo hacés es cómo que tenés un peso extra. Justamente eso es lo que no sacamos rápidamente de encima".

El trío de artilleros lo cierra Sebastián Penco, quien a diferencia de Tonelotto y Cuevas todavía no estuvo desde el principio en ningún encuentro, pese a lo cual no se desespera: "Uno trabaja con toda la fe para que se de la oportunidad de estar desde un principio. Igual, lo más importante para todos es que el equipo está andando bien y por eso el técnico tiene diferentes variantes", subrayó el nueve, quien es uno de los que les genera el mejor problema a Hrabina.