El Dakar quedó hoy a sólo dos etapas del final y con la disputa por la victoria limitada a un puñado de pilotos por categoría, donde la categoría motos se presenta como la única con dos candidatos con aspiraciones concretas. Ayer el español Marc Coma logró pasar al frente de la clasificación general, aunque el francés Cyril Després, quien hoy parte cuarto, podrá recuperar el liderzgo con alcanzar en carrera al catalán.

En el resto, el argentino Alejandro Patronelli, en cuatriciclos, el francés Stephane Peterhansel, en autos, y el holandés Gerard De Rooy, en camiones, tienen casi servido el triunfo final, aunque el camino que queda hasta Lima es nuevo para todos y exigente como nunca antes desde que este rally llegara a Sudamérica.

La etapa de ayer entre Arequipa y Nasca, con una especial corta de 196, fue acortada 49 kilómetros por la crecida de ríos, resultó la más “dakariana” en lo que va de la competencia y los corredores tuvieron que sortear 100 kilómetros de dunas desconocidas, viento, polvo y una inmensidad interminable.

EL SHOW DE GORDON

En autos, los primeros cuatro lugares fueron variados en marcas: Hummer, MINI, Hilux, y Mitsubishi, aunque en la clasificación general las cosas no llegaron a modificarse.

El de ayer fue un terreno ideal para que Gordon (Hummer H3) sacara provecho de todo el potencial de su vehículo y ganara la etapa de manera aplastante, por 15m.18s. sobre el segundo, el ruso Leonid Novitsky (MINI).

Y Gordon aprovechó los micrófonos que buscaban sus sensaciones por un nuevo triunfo de etapa, para defenderse sobre la desclasificación en suspenso que pesa sobre él y para atacar directamente a los pilotos de los Mini. “Mi coche tiene el mismo sistema que el año pasado, que fue aprobado por los comisarios. No tiene entrada de aire adicional”, se defendió Gordon. Y agregó: “Demostré que los MINI son unos coches de nenas porque les saqué 20 minutos de ventaja”.

Consultado sobre por qué estaba tan alterado, Gordon respondió: “Me exaspero, me exasperan Peterhansel y Nani Roma, que han puesto en duda mi honestidad, diciendo que soy un tramposo. Hoy (por ayer), sin embargo, he podido darles una buena patada en el c…”.

Pero fue el mendocino Lucio Alvarez quien volvió a dar el batacazo y con la Toyota Hilux del equipo Overdrive llegó en la sexta posición, con lo que se dio el lujo de relegar por un 1m.45s. al nueve veces campeón del Dakar, el favorito francés Stephane Peterhansel (MINI), a quien las dunas de Nasca le jugaron una mala pasada y lo dejaron varado 20 minutos.

“Para nosotros fue una muy buena etapa. En las dunas tuvimos mucha suerte porque las pasamos una a una y no nos quedamos en ninguna”, comentó Alvarez ya instalado en Nasca.

Para los protagonistas que ya llevan muchos Dakar encima, el terreno de ayer les recordó al de Mauritania, en el que la gran extensión de dunas deparó distintos tipos de superficies, con cortadas, piedras y arena blanda, que requirieron mucha navegación, además de lidiar con el viento, que fue otro factor adicional de dificultad.

En cuatriciclos, fue Marcos Patronelli (Yamaha) el que ayer cantó victoria de etapa y relegó a su hermano Alejandro por 42 segundos. Y en camiones el holandés Gérard De Rooy dio un verdadero golpe de gracia a sus perseguidores al adjudicarse también la etapa.

Fuente: Télam, DyN y Dakar.com