La temporada sanjuanina ya entró en la recta de las definiciones. El ciclismo rutero continuará hoy con el circuito que le rendirá homenaje ni más ni menos que a una de las clásicas más antiguas: la Mendoza-San Juan. La competencia, válida por la 17ma fecha del calendario sanjuanino abrirá la recta decisiva, porque quedarán solo dos pruebas para bajarle el telón al ciclo 2018-2019.
La prueba de hoy promete un trazado desafiante de 170 kilómetros que buscará a quien inscriba el nombre en el largo historial de ganadores de la competencia, que si bien en sus inicios largaba en Mendoza y culminaba en San Juan, hoy a pesar de no pisar suelo mendocino, continúa teniendo ese tinte especial por tratarse de una clásica. La largada será a las 15.30 horas desde Media Agua. Por calle Barboza el pelotón saldrá a Ruta 40 y viajará hasta el Control de San Carlos. Desde allí, en el limite con la vecina provincia, retornarán nuevamente por Ruta ingresarán a Media Agua, luego visitarán Pocito y Rawson y por Circunvalación viajarán hacia Chimbas. Descenderán de la autopista por calle Salta y encararán la recta final que seguramente ya habrá seleccionado a quienes lucharán por quedarse con la competencia. En pleno corazón chimbero realizarán cuatro giros a un circuito comprendido por las calles Mendoza-Benavidez-Salta y 25 de Mayo, después de eso sí, llegará el final justo en el ingreso del ’’Costanera Complejo Ferial’.
Juan Melivillo, ciclista de la Municipalidad de Pocito, es el último ganador de la prueba pero hoy habrán varios candidatos para sucederlo. Entre ellos estarán los que aspiran a pelear el campeonato sanjuanino como Nicolás Tivani, Nicolás Naranjo, Laureano Rosas, entre otros; pero también estarán los que quieren igualar el récord conseguido por Salvador Ortega, dueño de cinco clásicas: Ricardo Escuela, Naranjo, Adrián Richeze y Darío Díaz.
> Clasicómanos
Adrián Richeze, Darío Díaz, Ricardo Escuela y Nicolás Naranjo son los ‘clasicómanos‘ que sumando una victoria hoy igualarán lo conseguido por Salvador Ortega en 1949. Ese año Ortega ganó esa clásica y completó un círculo único que ningún ciclista pudo igualar: ganar las cuatro clásicas del ciclismo local.