Disfrutó los últimos kilómetros, entero, sonriente. Y en el tramo previo a la meta, hasta se acercó al vallado e hizo choque de manos con los espectadores que lo alentaban. Fabio Figueroa ganó con autoridad, con resto físico, como si no hubiesen pasado cuatro horas de esfuerzo y voluntad.

El triatleta se metió en la historia al convertirse en el primer sanjuanino en conquistar el Ironman 70.3, una de las carreras más emblemáticas del mundo y que ayer se desarrolló en la provincia. Con un registro de 4h02m24s, Figueroa tuvo revancha personal luego de que en 2022 se le escapara la carrera por muy poco, superando ayer al chileno Carlos Cortes, su escolta, por 3m57s.

Entre unos 1.000 atletas de diferentes partes del mundo, según la organización, Figueroa aprovechó la localía y su experiencia para liderar la prueba en el primer tercio del tramo en bicicleta. Su fuerte no es la natación, por eso el sanjuanino realizó un trabajo intenso en el último año para bajar sus tiempos y en las aguas el dique Punta Negra tardó 32m38s, tras recorrer 1,9 km y sabiendo que debía esperar su momento.

Gran labor. La bonaerense Yanina Minaglia se ubicó segunda en el Ironman en la rama femenina. Fue su primera vez corriendo en San Juan.

Y ese momento fue el tramo de ciclismo, los 90 exigentes kilómetros hacia Ullum para dirigirse luego al autódromo El Zonda. El sanjuanino venía de ganar la Vuelta a San Juan Masters y esa preparación fue fundamental para el Iroman.

A los 30 km de recorrido ya había pasado a la punta de la carrera y entonces mantuvo el ritmo. En promedio, Figueroa pedaleó a 43,19 km/h, para luego encarar el último sector, el de pedestrismo con una ventaja interesante sobre sus rivales. Fue un trazado de 21,1 km por demás difícil debido a los repechajes, especialmente la subida en la zona conocida como el cable carril.

Figueroa los recorrió a paso firme, enfocado en llegar a la meta ubicada en la calle de boxes del mítico autódromo El Zonda-Eduardo Copello y bañarse de gloria.

Por otro lado, la vencedora en mujeres fue la brasileña Larissa Fabrini, mientras que la mejor argentina resultó la bonaerense Yanina Minaglia. En el caso de la atleta de nuestro país, tomó la carrera como preparación para el Iberoamericano de Colombia y el Mundial en Finlandia, pero se encontró con un buen ritmo, especialmente en el ciclismo, y se posicionó muy bien ante Fabrini, quien se impuso finalmente.

Apoyo. La carrera fue acompañada por cientos de personas a lo largo del recorrido y en sus distintos escenarios deportivos.

La competencia se vivió bajo un sol espléndido, pese a la lluvia de la víspera, y con un buen marco de público a lo largo del recorrido.

Pero en general los fanáticos se concentraron en el autódromo y durante horas alentaron a los atletas que le dieron vida por segunda vez consecutiva al Ironman 70.3 en San Juan.

 

"Lo soñé 100 noches", confesó el ganador

A pleno. Los más de mil atletas que disputaron la segunda edición, durante el tramo de 90 kilómetros de ciclismo.

En la edición pasada del bautismo del Ironman en San Juan, la del 2022, Fabio Figueroa se había quedado con esa sensación de que pudo ser diferente, que sólo tenía que ajustar algunos aspectos para poder ganar.

Con esa premisa se preparó con intensidad, aprovechando la experiencia acumulada en su anterior ocasión y esta vez con bicicleta propia y con el empujón anímico de competir en casa.

Así, cambió el segundo puesto del año pasado al histórico primer lugar de ayer en el mítico autódromo "El Zonda". "Esto lo soñé 100 noches. Por eso creo que me va a llevar un buen tiempo darme cuenta que gané un Ironman", confesó emocionado el sanjuanino, tras cruzar la meta y ser felicitado por diversas personas.

"A la carrera la preparé desde que terminó el Ironman del 2022. Me propuse mejorar y se me dio finalmente ese objetivo.

Recuperación. El sector de recuperación para los atletas se montó en los boxes del autódromo, con piletas (agua fría) y camillas para masajes.

Conquistar esta competencia después de haber ganado la Vuelta a San Juan Masters el mes pasado me genera una satisfacción enorme, es una temporada magnífica en lo personal y estoy super feliz por este presente", apuntó Figueroa.

Con respecto a la prueba, el ahora dueño del Ironman 70.3 aseguró que fue una carrera estratégica. "Traté de sacar ventaja en la bicicleta y de mantenerme adelante en el tramo de a pie. Es mi fuerte y me sentía seguro, pero fue importante también lo que hice en natación. Pude plasmar el trabajo de muchos meses en el agua, que se notó lo pude mejorar bastante", destacó.

"A mitad de carrera ya sentía que no se me podía escapar el triunfo. Estaba fuerte e intenté disfrutarlo al máximo posible dentro de lo exigente de este nivel, busqué mantenerme en ritmo para llegar lo más entero posible.

Esta es una competencia de nivel mundial y vinieron atletas de muchos países. Medirme con ellos y ser el mejor es increíble", cerró Figueroa.