Alianza lo tuvo para liquidar en el primer tiempo, pero en el final del mismo pecó de ingenuo y se complicó solo. Villa Obrera supo aprovechar la chance que le dio el Lechuzo y con eso le alcanzó para empatar 1-1, en el choque disputado anoche en el Bicentenario, por la 16ta fecha de la zona 4 del Argentino B.

Las condiciones en el primer tiempo las impuso Alianza. Fue más claro y eso lo supo cristalizar en el dominio de los 45’. Con la claridad de Renzo Ahumada en el manejo, generó diversas opciones ante el villero, que nunca se sintió cómodo debido a la presión del equipo de Cristian Grabinski. El dominio lo supo cristalizar en el score Alianza a partir de los 20’ cuando tras un estupendo desborde de Daniel Díaz, entró solo por el segundo palo para anotar Martín Alaniz. La Villa no hacía pie y encima ya había sufrido la pérdida por lesión de uno de sus jugadores más experimentados como Sergio Fernández. El Lechuzo tuvo la posibilidad de liquidarlo con un zurdazo de Rubén Avila a los 43’, pero su remate dio en el travesaño. Y en lo que parecía una jugada intrascendente, Sebastián Pereyra cometió un infantil penal a Luis Alvarez, que encima le valió al Lechón la tarjeta roja. Federico Amaya, ya en tiempo de descuento, puso la igualdad desde los doce pasos y luego que el árbitro Precioza pitara el penal se fue expulsado el Pelado Díaz por protestar.

Pese a la desventaja numérica, en el complemento Alianza fue más claro. Tuvo la intención de ir a ganarlo y casi lo hace con un remate de media distancia de su figura, Amaya. En la Villa, faltaron ideas para ganarlo, aunque igual lo buscó con sus argumentos. Alvarez casi se saca un pleno con su definición ante Díaz, pero le faltó un poco de puntería. El ingreso del eterno Mariano Núñez le dio mayor profundidad al equipo de José Bravo y el Petinato metió un remate cerca del final que salió muy alto. Con el correr de los minutos, ambos equipos entendieron que el punto sumado era negocio debido a que todo quedara para definirse en los últimos dos juegos. No queda otra que esperar lo que se viene sabiendo que será una definición apasionante.