Debido a los interminables muestras de violencia en el fútbol argentino, a pesar del la cercanía y de la emoción que enciende un clásico, los hinchas sanjuaninos debieron conformarse con despedir a los jugadores de San Martín con un banderazo en el inicio de su viaje hacia Mendoza para enfrentar Godoy Cruz, debido a que el encuentro que se disputó sin hinchada visitante.
Sin embargo, las manifestaciones negativas parecen no tener freno. Y es que, cuando pasaba la mitad del segundo tiempo del partido jugado en el Malvinas Argentinas, el árbitro Andrés Merlos tomó la decisión de detener por unos segundos la actividad en la cancha y enviar un mensaje de advertencia a la tribuna local. El motivo: entonaba un cántico con la advertencia final de “un sanjuanino vamo’a matar”.