Boca copó prácticamente el hotel Viñas del Sol, que utilizó desde anoche y hasta la hora que partirá a la cancha el 62% de su capacidad. Permanecerá allí siempre durante su estadía y ocupará todas sus instalaciones. Hay exigencias solicitadas por el equipo y además se debió reforzar la seguridad para evitar incidentes.
Y es que no son sólo jugadores y cuerpo técnico, porque la delegación completa está compuesta por 41 integrantes, que se distribuyeron en 30 de las 49 habitaciones que cuenta el hotel.
El menú para las comidas fue pedido de antemano y contempla carne, pastas y abundante frutas, según relataron los encargados del lugar. Quienes destacaron que lo más solicitado es tener el frigobar de cada habitación completo con agua sin gas.
Anoche tras el arribo cenaron y hoy tendrán un pequeño entrenamiento en el parque-jardín del hotel, que se complementará con la utilización del gimnasio. También tienen a disposición la pileta por si alguno la requiere.
Las habitaciones son todas dobles, con excepción de la del director técnico Arruabarrena que es más amplia, con una cama matrimonial, un living con todas las comodidades incluida una barra, más el baño que cuenta con jacuzzi.
Mientras que el comedor será distribuido para la ocasión y previa a la salida a la cancha, el DT dará la charla técnica en la sala de conferencias.

