San Martín viene de ganar y en ese aval se apoyó ayer Juan Manuel Azconzábal a la hora de armar el equipo que el lunes, a las 20, visitará a Ferro en Caballito. Partido que marcará el inicio del Vasco presentándose fuera de Concepción. Y una condición en la que el Verdinegro todavía no puede obtener un triunfo de las seis salidas que registra hasta el momento. Por ello, y tras el balance que hizo del triunfo sobre Douglas Haig (2-1), donde tuvo picos de buen fútbol, con toque, profundidad y gol, es que en la práctica formal de fútbol paró al mismo equipo para ir Caballito. Incluso con la misma disposición táctica de tres atacantes, lo que marca que saldrá a buscar el resultado sin especular.
Una apuesta interesante, sabiendo que San Martín viene de dos victorias consecutivas (la anterior fue sobre Gimnasia y Esgrima de Jujuy), el ánimo está en alto, y es el momento ideal para aprovecharlo. Aquellos cambios posicionales se mantienen, la explotación de las bandas sigue, y sobretodo jugar por abajo seguirán mandando en el estilo de Azconzábal ante el Verde de Caballito.
Por ende, el probable equipo será con: Luis Ardente; Franco Quiroga, Francisco Mattia, Deivis Barone, Lucas Kruspzky; Cristian Alvarez, Maximiliano Bustos, Mauro Bogado; Leandro González, Gastón Caprari y Lucas Salas. Esta alineación estuvo en cancha 30’, ya que luego el entrenador fue cambiando progresivamente todo el equipo, incluso utilizando muchos juveniles para a la vez observar que material hay en la cantera.
El único que salió antes de tiempo fue el capitán Alvarez, quien todavía tiene secuelas del golpe en el tobillo que recibió en el partido del martes, y por eso apenas disputó 10 minutos y salió por precaución, dado que ni él ni el cuerpo técnico quieren que se pierda el compromiso ante Ferro. En su lugar ingresó el volante sanjuanino Nicolás Pelaitay, quien la fecha pasada regresó al banco de suplentes y tiene asegurada su continuidad dentro de los 18 que viajarán a Buenos Aires.
De esta manera, y en la previa al partido del lunes por la noche, Azconzábal tiene en mente apostar a la misma fórmula de su debut. Que tiene apoyo extra en que las dimensiones de la cancha de Ferro son grandes, y se adaptan aun más a lo que quiere el Vasco para su equipo, que es salir con pelota dominada, buscar una descarga y en dos o tres toques habilitar a los delanteros por afuera. Quienes ante Douglas ganaron prácticamente todo el partido, para generar profundidad y tener las opciones de gol que, precisamente jugando de visitante son escasas, teniendo en cuenta que tan sólo suma un gol fuera de Concepción y es el objetivo regresar de Caballito con los 3 primeros puntos del torneo.

