Apenas son 35 kilómetros desde San Juan capital pero en el Noreste de Angaco, El Plumerillo es un mundo aparte. Por muchas cosas pero en especial por la apasionante historia de amor por la camiseta que viven por éstos días los dirigentes, hinchas y jugadores de Atlético Huracán, el popular Globito angaquero. Es que están haciendo historia en la larga historia que ya tiene el club porque el titánico desafío de remover 800 camionadas de tierra salitrosa para tener por fin un campo de juego en el que se pueda jugar ya es realidad. El aporte incondicional del municipio, en la persona del intendente José Castro, y la apasionada entrega de toda la comisión directiva de Huracán, lograron que hoy el predio de casi dos hectáreas haya ya dejado atrás ese manto blanco, ese talco que impedía el nacimiento del césped. La presidenta, Adriana Escudero asume que esto recién es el comienzo porque apuntan a mucho más: "Sabemos que necesitamos ser locales. Ahora estamos jugando con las Inferiores (Quinta, Sexta y Séptima) en el torneo de la Liga de Albardón-Angaco pero lo hacemos en otras canchas y queríamos volver a nuestro club. Hubo respuesta desde la intendencia y decidimos encararlo. Se movieron mas de 800 camionadas de la tierra que había y todo quedó nivelado para comenzar a poner una capa de piedras y posteriormente traer la tierra donde en septiembre ya vamos a sembrar. Apuntamos a que en diciembre estemos con pasto y soñando que en 2015 ya podamos jugar como locales. Pero quedan obras muy importantes y faltan recursos. Vamos a realizar el alambrado olímpico del campo de juego y en eso, tengo que agradecer el aporte del ex-presidente de la ADA, Juan Quiroga, que nos donó 150 metros de malla. Además, vamos a cerrar todo el predio y en eso, el intendente Castro se portó muy bien. Quedan terminar los camarines y recuperar el playón para voley, básquet y futsal’.

La realidad deportiva de Huracán está en un impasse. Juegan las Inferiores de la Liga albardonera pero en Primera y Cuarta han solicitado permiso especial para no jugar el pasado Apertura y tampoco el Oficial. Quieren volver a jugar pero de locales. Le costó 38 años volver a jugar y desde hace 7 años se metieron otra vez en el ruedo pero ahora, por su gente, por su historia y por todo lo que Huracán significa para Angaco, quieren volver a vivir pero en su casa.