Buenos Aires, 17 de septiembre.-Los integrantes del plantel de Racing, sobre todo su entrenador, Miguel Russo, pasaron un mal momento antes del comienzo del partido con Lanús: porque un grupo de hinchas interceptó el micro para insultarlos y pedir la renuncia del DT.
Cuando el plantel de Racing estaba a dos cuadras del vestuario local del estadio Presidente Perón, dos horas antes del partido y con poca gente, un grupo de hinchas interceptó el micro.
Durante varios minutos los hinchas rodearon el micro insultado a los jugadores pero llamó la atención, según pudo observar Télam, que la mayoría insultaba a Russo y le pedía su renuncia.
Hasta ahora Russo, más allá de algunos gritos aislados el sábado pasado en la cancha de Quilmes, no había sido víctima de los gritos en contra de la gente.
Más allá de la situación violenta en sí, no hubo agresiones hacia el micro y luego de los gritos de malestar el plantel pudo llegar al vestuario sin más problemas.
