San Lorenzo, con el sanjuanino Emmanuel Mas de titular, se impuso anoche por 2 a 0 a Estudiantes, en el estadio Ciudad de La Plata, y con ello no solamente sumó una victoria que se había vuelto “multinecesaria” después de las últimas derrotas en el torneo local y la Copa Libertadores en el Nuevo Gasómetro, sino que además bajó de la cima de las posiciones del campeonato de primera división al “Pincha” (que ahora es propiedad exclusiva de Rosario Central) justo en la clausura de la cuarta fecha.

El conjunto de Boedo comenzó más incisivo y ya a los 6 minutos Enzo Kalinski habilitó a Mauro Matos, que de media vuelta obligó a Agustín Silva, reemplazante del desgarrado Hilario Navarro. Y a los 9 minutos llegó el gol cuervo por intermedio de Sebastián Blanco, que “escribió y vendió” la conquista, ya que inició la acción con una habilitación a Franco Mussis por derecha, quien de primera la metió en el área y el propio ex Lanús, con un toque de zurda, aprovechó para marcar. A partir de ahí los de Edgardo Bauza apostaron a la contra y el “Pincha” manejó la pelota, pero sin claridad y lejos del arco. Recién a los 32 minutos pudo aumentar el “Ciclón”, que encontró un anticipo de Emmanuel Mas en un córner pero la pelota se fue arriba. Los de Mauricio Pellegrino recién sobre el final dispusieron de una chance cuando a los 42’ un centro de Sánchez Miño fue conectado por Luciano Acosta de cabeza, pero el balón pasó cerca. Luego Carlos Auzqui exigió a Sebastián Torrico.

Ya en el segundo tiempo Estudiantes se paró unos metros más arriba e intentó presionar la salida de su rival, algo que le hizo perder la brújula al mediocampo visitante. Es que el equipo alternativo que presentó Estudiantes, que además también tiene desgarrado a su goleador, Guido Carrillo y al volante Román Martínez (junto a Navarro serán baja en el próximo compromiso de Libertadores, el jueves ante Libertad, líder de su grupo, en Paraguay) y ayer contó con el debut del lateral izquierdo ex Rosario Central Rafael Delgado, pasando el uruguayo Alvaro Pereira a la zaga central, padeció el “mal de ausencias” en todas sus líneas. Encima, Silva siguió defeccionando casi como de costumbre, y prueba de ello fue que después de una interrupción de siete minutos, entre los 17 y los 24, por una disminución de la energía lumínica, recibió un golazo desde 40 metros del ingresado Pablo Barrientos por estar muy adelantado. Por eso después de esa conquista y aún cuando con descuento y todo quedaba como media hora de partido, ya Estudiantes no tuvo respuestas y le a San Lorenzo totalmente expedito el camino hacia un triunfo muy necesario.