San Lorenzo venció a Rosario Central 2-0 en un partido en el que impuso condiciones durante todo el trámite. Presionando la salida y recuperando rápido la pelota fue obligando a Central a jugar de contra. Tanta era la insistencia del local que la primera opción la tuvo con un remate del zaguero Braghieri, quien disparó desviado a los 7 minutos.
Tres minutos después, Jorge Broun debió exigirse para evitar el gol del paraguayo Óscar Romero. Firme en el fondo y sólido en el medio campo, San Lorenzo, buscaba con más y mejores armas el gol. Cada vez que el pibe Palacio encaraba por la derecha abría una brecha y generaba algo. Sin embargo, sobre los 27m. fue Central el que casi abre el marcador, cuando Marinelli se animó por la izquierda y su diagonal terminó a metros del arco con un remate que obligó a un cierre salvador del arquero Devecchi para evitar el gol.
La insistencia de los dirigidos por Davobe crecía, sobre los 31m. Di Santo erró un gol increíble, cuando quiso colocar con la derecha -su pierna menos hábil- una pelota contra el palo. Cinco minutos después, el mismo Di Santo, tuvo otra opción y no la desaprovechó. Con una volea de zurda batió a Broun y puso cierta justicia al marcador.
En el segundo tiempo San Lorenzo salió con todo a definir el pelito y en cuatro minutos, tras dos buenas intervenciones de Melano, los hermanos Romero estuvieron cerca del segundo. Ángel no pudo conectar de cabeza un centro en el área chica y Óscar exigió otra vez a Broun.
Central salió del asedio y propuso el golpe por golpe, pero en el vértigo de ida y vuelta, San Lorenzo era más profundo. Vecchio, con un tiro libre que se fue alto, conseguía lo más claro para los rosarinos que chocaban contra su impotencia. A los 43, Devecchi le atajó una media vuelta a Martínez Dupuy.
Después, ya en el alargué el partido se "picó" hubo algunos agarrones y empujones, Central sufrió dos expulsiones y a los 58m. Ángel Romero liquidó el pleito con un remate bajo. De los dos ganó, quien fue el más claro en su propuesta de juego.