Rosario Central derrotó a Newell’s Old Boys, que sigue siendo el líder del torneo Inicial, por 2-1 en el Clásico de Rosario jugado en el estadio Gigante de Arroyito luego de tres años y logró salir de la zona de descenso.
Donatti, de cabeza, a los 11’ abrió el marcador para el local, a los 15’, Maxi Rodríguez igualó para la visita pero, a los 28’, Encina volvió a poner en ventaja (todo en el primer tiempo) al Canalla, que festejó junto a los 45.000 hinchas que colmaron la cancha.
En el clásico rosarino la fiesta fue toda de Central que luego de tres años de sufrimiento en la segunda categoría superó a su máximo rival, que llegaba con la chapa del título del Final y la punta del Inicial, con un partido efectivo y planteado de manera inteligente por el DT Miguel Angel Russo, quien mantuvo su invicto ante la Lepra.
Con este triunfo, festejado como una final del mundo tanto por los jugadores como por la gente, Rosario Central alcanzó los quince puntos y logró salir de la zona de descenso pasando la línea de Godoy Cruz y All Boys.
En tanto, Newell‘s, que en la primera etapa tuvo para empatarlo y hasta darlo vuelta, se fue del Gigante de Arroyito con el dolor de una dura derrota (tras cinco victorias al hilo) pero con la tranquilidad de seguir en lo más alto de las posiciones.
Rosario Central sorprendió con una presión agresiva. Y, por una falta cerca del área, llegó la apertura del marcador: centro de Delgado, peinada del ex Lanús y aparición en soledad de Alejandro Donatti en el segundo palo para conectar de cabeza en el palo más lejano de Guzmán.
A pesar de los obstáculos y la desventaja, el campeón del último torneo Final no perdió la cabeza y llegó rápidamente a la igualdad de la mano de Maxi Rodriguez que selló el empate y desató el festejo polémico con el ‘Topo Gigio’ que patentó Riquelme. El equipo de Berti creció a partir del gol y pudo haber dado vuelta el tablero, pero Central en su segunda llegada profunda amplió la cuenta con algo de fortuna ya que Luna habilitó, cayéndose, a Encina, quien marcó.
En la segunda etapa el ritmo del partido se cayó y las ocasiones de gol desaparecieron. Central se dedicó a cuidar el resultado con firmeza y orden, mientras que, Newell’s, con bajas actuaciones individuales, no tuvo sorpresa ni profundidad para, al menos, llevarse un punto.